El Aguas de Teror B y el Artevirgo La Aldea, equipos de la categoría preferente del fútbol sala que protagonizaron una bochornosa pelea al final del partido que disputaron hace dos semanas, el pasado sábado 15 de octubre, ya conocen la sanción del Comité de Competición de la Federación Interinsular de Fútbol de Las Palmas. Cada uno de los dos clubes ha recibido una multa de 200 euros y además se clausura durante un encuentro el recinto deportivo del Teror B al considerar el Comité los hechos como "incidentes graves".

No hay sanciones individuales ya que el colegiado del encuentro no dio ningún nombre propio en el acta. La pelea se produjo al final del encuentro, cuando los jugadores se saludaban amistosamente en el centro de la cancha y un jugador del Teror que venía de la grada al encontrarse de baja recriminó a un a un rival una agresión a un compañero de su equipo. Su aparición fue el detonante y tanto locales como visitantes se vieron envueltos en una pelea que duró varios segundos donde algunos espectadores más -hasta dos, igual de exaltados- descendieron desde la grada. Los jugadores involucrados ya han hablado entre ellos, así como los presidentes de ambas escuadras, firmaron la paz poco después de la pelea y todos han dado carpetazo al asunto sin denuncias.

"Me parece una sanción correcta y adecuada. ya hemos contestado al Comité de Competición para informarles de que la aceptamos, que estamos de acuerdo y de hecho vamos a cumplir el partido de sanción este fin de semana. Ya hemos propuesto otra cancha y lo acatamos", asegura el presidente del club de la Villa Mariana, Rubén Domínguez.

"Me parece una sanción justa y salomónica porque sanciona por igual a los dos equipos, a los dos que habíamos estado involucrados de la misma forma. Y han tenido en cuenta la economía de los clubes, somos modestos", añade. "Dentro de lo que es el presupuesto del club tampoco supone una excesiva cantidad, es asumible", sentencia Domínguez.