El Bayern de Múnich encargará un estudio independiente sobre el papel que desempeñó la institución en la época nazi, que recientemente ha sido objeto de polémicas después de que el historiador Markwart Herzog pusiera en duda la imagen del club como una especie de "foco de resistencia" en ese tiempo.

Así lo asegura en su edición de hoy la revista 'Der Spiegel', que fue también el primer medio que en su momento se hizo eco de las investigaciones de Herzog.

En 2005 el Bayern recibió el Premio Julius Hirsch precisamente por su "compromiso en la resistencia contra el nacionalsocialismo", según el acta del premio concedido por la Federación Alemana de Fútbol (DFB).

La imagen del Bayern como "club de la resistencia" está asociada a la de uno de sus presidentes, Kurt Landauer, que tuvo que dejar el cargo en 1933 por ser judío y luego se reincorporó a él en 1947.

En 1940, incluso, en un episodio increíble, toda la plantilla del FC Bayern visitó a Landauer en Ginebra aprovechando un partido amistoso contra el FC Servette, desechando temores sobre posibles represalias por mantener contacto con el exfuncionario judío.

Además de a Landauer, el Bayern tuvo, antes de 1933, cuatro entrenadores judíos, entre ellos Richard Dombio, con quien se coronó campeón alemán, por primera vez en su historia, en 1932.

Antes de las investigaciones de Herzog, la imagen del Bayern durante el nacionalsocialismo era asociada a su condición de "club de los judíos" y a su resistencia a las directivas nazis.

Según esa versión, tras 1933 y la dimisión forzada de Landauer, los nazis convencidos -normalmente pertenecientes al departamento de esquí del club- siguieron siendo minoría dentro del Bayern y la mayoría de las directivas nazis tendían a ser, en la medida de lo posible, ignoradas por los dirigentes.

Herzog ha cuestionado esa imagen y sostiene que el Bayern no fue "mejor ni peor" que otros clubes con respecto a su comportamiento ante el régimen nazi.