"Desde que estoy aquí siento que mejoro a diario"

Tuvimos un día libre porque debíamos limpiar nuestra mente, descansar. Llevábamos tres partidos en más de una semana fuera. Jugamos en Skopje, después volvimos a Santiago para jugar contra el Obradoiro y después en Zagreb ante el Cedevita. Volvimos a casa y teníamos otro partido, así que fue una semana dura en la que apenas pudimos entrenar. Ahora estamos en eso, con la mente despejada y concentrados en el próximo partido que es contra el Nizhny.

Y usted, particularmente, ¿cómo está en estos momentos después de un par de meses de competición?

Mejor, ahora estoy bien. Tuve una pequeña lesión en el primer partido de la gira en Skopje, pero tenía que estar listo para jugar. Tenía que jugar, Darko [Planinic] no podía hacerlo y debía ayudar al equipo. Fue difícil, pero me dije a mí mismo que tenía que jugar, que tenía que ayudar al equipo aunque fuera difícil. Creo que era lo correcto en ese momento.

Es su segunda temporada aquí en el Gran Canaria. ¿Qué sentimiento le invade ahora?

Puedo decir que la primera vez que vine aquí, cuando estaba viviendo en Letonia, pensaba que echaría mucho de menos mi casa. Pero cuando estoy aquí, lo primero que digo es que precisamente me siento como en casa. Me sorpendió porque realmente solo llevo un año aquí, pero cuando volví este verano lo dije: me siento como en casa. Me siento parte de este equipo y de esta Isla.

¿Qué valoración hace de este año y medio que acumula como jugador del Herbalife Gran Canaria?

El año pasado di un salto fantástico en mi carrera. Soy un jugador más físico, más técnico, con mejor mentalidad... Aíto [García Reneses] me enseñó mucho eso. Ahora lo hace Luis [Casimiro]. Siento que estoy mejorando cada día desde que estoy aquí. Así lo siento y así lo digo.

¿Por qué eligió Gran Canaria por encima de otras opciones el verano pasado?

Lo principal, lo primero, porque Aíto estaba aquí. Además había escuchado que el Gran Canaria trabajaba muy bien con los jugadores jóvenes. Por ejemplo, lo hicieron con Edy Tavares. Fue la demostración que me pusieron. Lo hicieron con él, que no sabía jugar antes de llegar. Esa demostración y que Aíto estuviera aquí me hicieron que me decidiera por jugar en el Herbalife.

¿Echa de menos a Aíto?

Por supuesto, es un entrenador muy bueno. Me queda un gran recuerdo de él. Es uno de mis entrenadores favoritos de toda mi vida.

¿Con qué se queda de él como entrenador?

Lo principal, lo que me transmitió. Me enseñó a mantener la calma, a no tener pánico en la pista. Jugar con una idea fija, con la mente en no tener miedos en la cancha.

Y ahora con Luis Casimiro, ¿qué está aprendiendo con él?

Desde que empezó la temporada, creo que está haciendo de mí un jugador más atlético, que corra más, que machaque más, que coja más rebotes...

Además de eso, ¿qué ha aprendido aquí durante este tiempo?

Necesitaríamos mucho tiempo para explicarlo todo [se ríe]. He aprendido muchas cosas, tanto en la cancha como fuera de ella. En Riga vivía con mi familia y muchos de las tareas del hogar las hacían ellos; cocinaban, hacían la colada, limpiaban... Aquí estoy solo, me he hecho un hombre. Eso ha sido bueno también para mí.

¿Qué necesita este año para dar otro salto de calidad en su juego? ¿Cuál es el siguiente paso personal?

Creo que un deportista, un jugador de baloncesto, está mejorando todo el tiempo. En cada etapa, en cada entrenamiento se van aprendiendo cosas. Si crees que por descubrir algo nuevo, por aprender un día ciertas cosas lo tienes todo hecho, estás equivocado, es una mala decisión. Puedes captar nuevas habilidades, mejor físico... Así que tengo que crecer en todo, es algo que he hecho toda mi carrera.

Durante el año pasado, Aíto comentó que tenía los fundamentos, pero que le faltaba mejorar sobre todo físicamente. ¿Está de acuerdo con él?

El año pasado una de las cosas que más trabajé fue eso. Al comienzo de la temporada no podía correr, estaba siempre cansado, asfixiado, no aguantaba el ritmo ni entrenando ni jugando. Es verdad, eh, me ponía rojo rapidísimo. Me puse a trabajar con Juanjo [Falcón, preparador físico del equipo] para intentar mejorar en ese sentido. Hizo un trabajo fantástico conmigo y ahora me permite jugar mejor.

Edy Tavares también ha realzado el trabajo de Juanjo Falcón en su progresión. ¿Tan importante ha sido?

Sí, es asombroso. Cuando salimos a la cancha hay trabajo de mucha gente detrás, está el entrenador principal, sus asistentes y también él. Nadie sabe cuánto nos ayuda él, es increíble.

¿Tiene un plan especial para trabajar su físico este año?

Sí, sí, para cada uno de los jugadores. Sabe lo que hace.

¿Se siente más imporante durante esta temporada?

Creo que mi rol es un poco mayor que el año pasado, estoy trabajando para ello, para mejorar. El año pasado me uní al primer equipo a mitad de la temporada porque antes estaba en el segundo equipo, el que compite en EBA. Pero ahora me siento parte del equipo por completo, más profesional.

¿Se siente con más responsabilidades que la temporada pasada? ¿Cómo asume ese cambio de rol?

En la pista no piensas en eso, solo piensas en que tienes que hacer tu trabajo. En ese sentido, piensas como lo has hecho siempre: ayudar al equipo en lo que puedas.

El año pasado compartió posición con Alen Omic y Taph Savané. Este año lo hace con Darko Planinic y Richard Hendrix. ¿Cómo lo vive?

Bien, competimos en cada entrenamiento por ser mejores y ganarnos nuestros minutos. Así que bien.

En estas dos temporadas, ¿con qué momento de los vividos aquí se queda?

Si esta pregunta llega a ser en verano, te hubiera dicho la Copa del Rey del año pasado. Si me lo preguntas ahora, te diría que la Supercopa porque ganamos el primer título para el club. Así que espero que los mejores recuerdos aquí estén aún por suceder.

¿Cree que a pesar del mal arranque el equipo puede conseguir meterse en Copa del Rey?

Si nos mantenemos como estamos jugando últimamente digo que sí. El problema está en que tuvimos un mal inicio de temporada en ACB, pero ahora nos hemos levantado. Tenemos un buen juego y jugamos, estamos en un momento positivo y creo que podemos hacerlo.

Compartió generación con Kristaps Porzingis en las categorías inferiores de Letonia. ¿Le sorprende su rendimiento en la NBA?

Sí, por supuesto, creo que todo el mundo lo está. Sabía que podía jugar bien, pero está dando un nivel muy alto. Está haciendo un buen trabajo.

A veces se le compara con él, ¿se puede? ¿Se siente cómodo con esa comparación?

No creo que seamos el mismo tipo de jugador. Tenemos habilidades distintas. Por ejemplo, él puede jugar más por fuera y yo más por dentro. Quizá sí que nos parecemos en que tenemos un peso y una talla similar, pero no en mucho más. No se puede comparar.

¿Sueña con jugar en la NBA?

Es algo con lo que sueñan todos los jugadores de baloncesto. Pero ahora mismo estoy concentrado en mi trabajo y en el partido de la Eurocup.

¿Qué partido imagina contra el Nizhny?

Jugamos contra ellos antes y nos fue bien. Le hemos hecho un buen 'scouting' y sabemos lo que tenemos que hacer con ellos para volver a ganar.

¿Cuál es su sueño de esta temporada?

Tengo muchos pequeños sueños. El siguiente que me gustaría cumplir es ganar la Copa del Rey. Es difícil, pero sé también que es posible lograrlo.