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La censura española de nuestro boxeo

La censura española de nuestro boxeo

En 1989, siendo Presidente del Gobierno español Felipe González, uno de sus hombres de la máxima confianza de aquel, Luis Solana, director general de Radio Televisión Española (RTVE), tomó la drástica y cínica decisión de suprimir la emisión de imágenes de combates de boxeo, lo que causó una fuerte polémica en los medios mas próximos a esta actividad mientras la Federación Española de Boxeo anunciaba que emprendería acciones judiciales en contra de tal medida, sin que hiciera nada de nada ni volviéramos a saber del asunto, salvo los gritos del público, que irritado con tal decisión, en las veladas solía gritar: "Solana, cabrón, queremos televisión".

La medida del cínico Solana vulneraba varios artículos de la Constitución referidos a la exigencia a los poderes públicos de fomentar el deporte, así como al derecho de comunicar y recibir libremente información a través de cualquier medio de difusión lo cual fue en su día debatido en el Consejo de Administración de RTVE sin que se consiguiera el menor acuerdo sobre la nefasta prohibición. Prevaleció, pues, el cinismo del socialista Solana ya que mientras se pretendía dejar 'ko' al boxeo no se aplicaban los mismos criterios a otros contenidos de TVE. Como los casos de asesinatos, drogas, violencia y otros sin ética e inadecuados para los menores y jóvenes en formación de personalidad.

Se trató, pues, de una medida vergonzosa, pudiéndose calificar esta decisión con los más duros adjetivos. El caso es que en España en general y en nuestra Comunidad Autónoma en particular, pese a que tenemos televisión propia, como es la autonómica, hasta ahora la llamada clase política -y especialmente los localistas, que debieran haberse arrepentido- o no ha sabido o no ha querido reaccionar pese a que el deporte es competencia de nuestra Comunidad Autónoma en el ámbito territorial de Canarias.

Por eso mismo se ha dicho -entre quienes me encuentro- que los amantes de la nobleza del boxeo y de los grandes valores que atesora deberíamos empezar a plantearnos emprender alguna iniciativa que haga llegar a la sociedad y a la opinión pública que se trata de un deporte ejemplar que figura entre aquellos para los cuales los canarios estamos mejor dotados, como acontece con el fútbol, natación, vela, windsurf, baloncesto y balonmano femenino así como el judo, que tan bien practicara mi entrañable compañero de curso Amado Ramos, Coruña y otros más, algunos de cuyos participantes hemos visto, con legítimo orgullo como intervenían en Juegos Olímpicos.

Aún no están tan lejanos los tiempos -por lo que algunos como yo tenemos el privilegio de recordarlos- en que disfrutábamos hallándonos a la cabeza de España por lo que atañe al boxeo, los tinerfeños Velázquez, por ejemplo, nuestro querido Valerón del boxeo, quien logró múltiples títulos, incluso internacionales, como amateur y el campeonato de España, Europa y del Mundo cuando se pasó al campo profesional y Juan Albornoz, conocido por 'Sombrita', campeón de Europa de los superligeros; nuestro paisano, el sordomudo 'Kid Tano'; Cesáreo Barrera, Campeón de Canarias y de España, quien en dos ocasiones disputó el título mundial, a quien se le ha calificado certeramente como 'el insaciable bombardero del Puerto'; Barrera Corpas, el Ciclón del Atlántico; Lelo Suárez, uno de los mejores y más elegantes boxeadores que ha dado Canarias, quien se enfrentó a los más famosos de su época; 'Paquillo', campeón de España y hoy prestigioso colombófilo, cuya evolución como se ha dicho, fue de verdad imparable en el panorama de la época, y que a sus 22 años, se proclamó campeón de Canarias amateur, logrando la medalla de plata en los Nacionales en Salamanca, para revalidar meses más tarde el cetro en el Archipiélago y, en Madrid. Estos y muchos más a quienes tuve la fortuna de ver pelear y a algunos de los cuales incluso conozco, pero que no quiero seguir mencionando si por omisión involuntaria dejara fuera de la mención a alguno merecedor de ser recordado, todos los cuales, sin embargo, están, sin excepción, en mi pensamiento.

Es hora, pues, de que los poderes públicos canarios, si se consideran canarios de verdad, reaccionen. Nuestros representantes en Madrid en ambas Cámaras tienen la posibilidad y con ello la obligación de enterrar para siempre el esperpento boxístico de Solana.

Especialmente los socialistas canarios, para que, al menos en tierras canarias, se logren recuperar de esa 'ida proa al marisco' que parece haberse iniciado en Madrid, de suerte que aquí al menos la ciudadanía se percate de que sus paisanos socialistas han enmendado la imbecilidad de Solana, para poder seguir fomentando en nuestra tierra un deporte que se nos ha dado siempre bien, hasta que TVE tomó aquella decisión, pareciendo desde entonces -y no es así- que dejaba de existir.

Al presentarse ahora ante sus paisanos, en unión de otros canarios más, muy conocidos, en el Gran Canaria Arena, Ferino V es cuando no solo tendremos ocasión de ver de lo que es capaz en su legítima pretensión de proclamarse Campeón de Europa.

Sino también a Samuel Carmona Heredia, "gitano orgulloso de serlo", antiguo vendedor ambulante, quien lleva el sobrenombre de su abuelo tatuado en el labio, así como al resto de boxeadores isleños que intervendrán en igual fecha, quienes con toda seguridad acreditarán que realmente no solo son claras promesas de dicho deporte, sino que existe evidente afición en nuestra tierra.

De lo detallado resulta, más claro que nunca, que tanto el Gobierno del tinerfeño Fernando Clavijo, a nivel de toda Canarias, de igual forma que la Presidencia del Cabildo Insular de Gran Canaria, tienen mucho que decir y hacer a favor y promoción del boxeo pese al golpe bajo que un día recibió del socialista Solana cuando gobernaba Don Felipe, ahora la televisión autonómica canaria (TVC) tiene la ocasión de remendar.

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