Dos títulos de Europa en juego en la histórica velada que se disputaba anoche en el Gran Canaria Arena y dos campeonatos que se quedan en casa. El primero de ellos dejó un muy buen sabor de boca entre los aficionados que, en buen número, se acercaron hasta el recinto de Siete Palmas para presenciar la velada Gran Canaria Boxea, pues después de casi cincuenta años volvían a ponerse en juego en una misma velada dos campeonatos de Europa con púgiles españoles como protagonistas. Entonces fueron José Legrá y el tinerfeño Miguel Velázquez en Madrid; y ayer, en la Isla, lo hicieron Ferino V y Abigail Medina Bebe.

Y al cierre de esta edición, aún quedaba el combate que debían dirimir el grancanario Jerobe Chocolatito Santana frente a David de Jesús Morales Piolín, que fue visto y mno visto, porque el púgil isleño, que defendía su título de campeón del Mundo Júnior WBC del peso ligero frente al nicaragüense, ganó por k.o. en el primer asalto, Jerobe soltó una mano al hígado de su rival y éste ya no se levantó del ring.

Y el primero en saltar al ensogado con ese título, el de los pesos welters, en juego, fue el teldense Ceferino Rodríguez Noda, Ferino V, quien se enfrentaba al francés de origen marroquí Ahmed El Mousaoui, en un combate pactado a doce asaltos que se resolvió a los puntos en favor de Ferino V, pero en decisión bastante dividida por parte de los jueces que siguieron la pelea.

El juez número 1 dio 113-112 para Ferino; el juez número 2 calificó en su cartulina 112-113 para El Mousaoui y, finalmente, el juez número 3 presentó una cartulina con 114-112 para Ferino V, aclamado por sus paisanos al hacerse con el cinturón de campeón de Europa.

Un cinturón que obtuvo casi salvado por la campana, porque el teldense, que controló a la perfección los doce asaltos, a punto estuvo de caer por k.o. en el duodécimo y definitivo, tras una alocada y desesperada acción atacante del franco-marroquí en busca de un golpe que fuera definitivo, y casi lo consigue, porque en un despiste del grancanario, Ahmed El Mousaoui conectó una buena combinación que acabó con una izquierda que mandó a Ferino a la lona. Sin embargo se recompuso bien y tras la cuenta de protección y en la vuelta al ring sonó la campana que daba por finalizado el combate.

Influyeron sobremanera en la decisión de los jueces las dos amonestaciones recibidas por el púgil galo, en los asaltos sexto y décimo, por golpear con el codo al teldense en la cara. De hecho, aunque el colegiado no lo consideró así, en el sexto un cabezazo hizo una brecha en la ceja izquierda a Ferino. Pero en la esquina del teldense trabajaron bien y fue bien restañada la herida, que no volvió a abrirse en el resto del combate.

Además, aún cuando los componentes del equipo del francés no se mostraban nada de acuerdo con la decisión final, es justo señalar que en el undécimo asalto debió acabarse la pelea con Ferino ya vencedor -se anotó con suficiencia los asaltos intermerdios, en especial el cuarto, donde incluso llegó a tener muy tocado al boxeador galo-, pues el colegiado italiano, que llamó la atención en dos ocasiones a El Mousaoui por usar los codos, debió señalarle la tercera amonestación y, por tanto, ser descalificado.

Pero lo importante es que, pese a ese despiste final que casi le cuesta el título de Europa, éste se quedó en casa y Ferino V es el 51º boxeador español en presumir de llevar sobre sus hombros un entorchado europeo. Un cinturón, el de los pesos welters, al que se hizo acreedor merced a su mejor técnica y superando a un rival correoso, marrullero y que le sacaba mucho en envergadura, tanto de altura como de brazos, lo cual no fue óbice para el teldense hiciese su buen boxear que le llevara a hacerse con el título.

Sultán cae por k.o.

El segundo título de la noche en juego era el Campeonato de España del peso welter y tenía por protagonistas a Nabil Sultán Krissi, del Team Formento, y el mallorquín José del Río El Niño, y se resolvió por la vía rápida en favor de este último.

No tuvo suerte el Sultán. Nada más comenzar el combate, cuando apenas habían transcurrido veinte o treinta segundos del primer episodio, el zurdo Del Río cazó a Krissi con una buena izquierda que dio con el hombre del Team Formento en la lona y debió recibir una cuenta de protección. Se repuso Sultán e incluso logró conectar un par de buenos golpes. Sin embargo, ahí estuvo el error del púgil afincado en Gran Canaria: realizó un boxeo muy estático y a la espera tan sólo de sorprender a El Niño con un golpe ganador que resolviera la pelea por k.o.

Los dos siguientes asaltos fueron más equilibrados, con buenos intercambios de golpes, y con Sultán teniendo más iniciativa en busca de ese golpe definitivo. Pero Del Río salía muy bien a la contra, golpeando y haciendo daño a Nebil, que en los segundos finales del tercer asalto se vio también salvado por la campana, porque una combinación del mallorquín llegó nítida a su rostro y cuando parecía estar k.o. se oyó el sonido salvador.

Ya Krissi no fue el mismo a la salida del siguiente asalto y esto lo aprovechó Del Río, que le dejaba hacer en su búsqueda del golpe definitivo para machacarle a la contra, y en una de éstas logró conectar de nuevo su izquierda en el rostro de Sultán y luego le arrinconó justo en el momento en el que el colegiado decidió parar la pelea para evitarle un castigo mayor y decretó el k.o. técnico que daba el título de España a José del Río El Niño, quien puso en práctica su gran experiencia sobre el cuadrilátero para hacerse con un fajín con el que soñaba Krissi desde hace mucho tiempo.

Segundo título para España

El hispanodominicano Abigail Medina Bebe sería el tercero en subir al ring con título en juego. Se enfrentaba, en busca del cinturón del Campeonato de Europa del peso supergallo al francés Jeremy Parodi y, después de un vombate donde hubo un equilibrio enorme, se hizo con el entorchado el púgil de la promotora Gallego Prada, con lo que se convierte en el 52º púgil español en ser Campeón de Europa.

La decisión unánime de los jueces -que no gustó en absoluto al púgil galo, quien abandonó el cuadrilátero con evidentes muestras de enfado y disconformidad con el resultado-, no estuvo quizá acorde con lo que se vio sobre el ensogado, por cuanto el equilibrio entre ambos púgiles fue notorio y pudo ganar cualquiera de los dos, sobre todo porque aunque Bebe metió los mejores golpes, con buenos uppercuts para después lanzar su gancho de derecha que no logró conectar nítidamente en ningún momento, y algún que otro crochet, no es menos cierto que el galo, con buenas combinaciones y, sobre todo, con su jab de izquierda casi siempre conectando en el rostro del púgil de Gallego Prada, también pudo decantar el triunfo a su favor.

La decisión no compartida por el equipo del púgil galo significa que el título bien pudo haber sido para su boxeador, aunque finalmente el cinturón se quedó también en España.

Debut victorioso de Nano

La noche comenzó con otros tres combates de púgiles locales. Tras el baile de presentación, entre un gran ambiente en el recinto de Siete Palmas, saltaron al ring el nicaragüense Edwin Téllez y una de las firmes promesas del boxeo grancanario: Nano Gallito Santana, quien hacía su debut en el campo rentado después de una exitosa carrera como amateur.

Peleaban estos púgiles en el peso supergallo a la distancia de cuatro asaltos de tres minutos. Cuatro asaltos en los que el Gallito se mostró muy combativo, en especial en los dos primeros, que se anotó con autoridad, tras controlar en todo momento a su adversario en distancia y saber hacer sobre el cuadrilátero.

Los otros dos asaltos fueron un tanto más igualados, sobre todo porque el residente en Vecindario notó un poco el esfuerzo realizado hasta el momento, pero en ningún momento vio peligrar su triunfo, que al final se decidió a los puntos, por decisión unánime de los jueces.

Exhibición de Jarni

Acto seguido saltaron al cuadrilátero el malacitano, nacido en Mijas, en plena Costa del Sol, Sergio Abad y otra de las firmes promesas, ya hecha una realidad, del pugilismo en Gran Canaria: el isletero Jarni Cabrera El Problema Suárez, para medirse, dentro del peso welter, a la distancia de cuatro asaltos de tres minutos cada uno de ellos.

Al final, segundo triunfo local de la jornada, pues el nieto de Lelo Suárez -una de las leyendas del boxeo canario de la buena época-, con un control en todos y cada uno de los cuatro asaltos, no tuvo problemas para hacerse con la victoria, que asimismo sería por decisión unánime de los jueces.

Muestra, incluso, de la superioridad del púgil isletero sobre el ensogado fue que, al término del combate del combate, se pudo comprobar que el andaluz estaba bastante perjudicado, dañado por un corte en el pómulo izquierdo.

Como anécdota, se produjo también otro debut en este combate. Fue el de la árbitro isletera Eva de León Niebla como juez de silla. Posteriormente también actuaría en el combate de Samuel Carmona.

Duro combate de Carmona

El tercer combate de la macrovelada 'Gran Canaria Boxea', debía enfrentar, según la hoja de ruta prevista por la organización, al sureño Sury Muti 'Suryman', con el nicaragüense Ronny McField. Pero el mismo se cayó del cartel porque el rival del de Maspalomas ya no se presentó en la tarde del pasado jueves en la sesión oficial de pesaje, desarrollada en el antepalco del Estadio de Gran Canaria.

Por eso, los organizadores decidieron realizar, en ese mismo instante, un descanso -que no estaba programado-, antes de la disputa del siguiente combate. Un combate que, a priori, había despertado una gran expectación entre los entendidos, pues su protagonista era, nada más y nada menos que el isletero Samuel Carmona Heredia, olímpico con España en los últimos juegos de Río de Janeiro el pasado verano.

Se enfrentaba Carmona al catalán Mokhlis Aouach, dentro del peso minimosca y a la distancia de tres asaltos de tres minutos y uno de descanso, como es preceptivo en el boxeo amateur.

Al final de los tres asaltos, tras un muy duro combate, donde los dos púgiles lo dieron todo, sin guardarse nada en su boxear, el isletero se impuso por puntos en decisión unánime de los jueces. Fue un bonito combate, donde no paró el intercambio de golpes, y que agradó al respetable asistente, que en esos momentos de la velda rondaba las tres mil personas.

Parra, descalificado

El que era quinto combate de la noche enfrentaba al catalán Juli Giner con el venezolano Lorenzo Parra, dentro del peso superpluma. Dos experimentados boxeadores, con más de treinta combates en su haber, que, sin embargo, decepcionaron en el Gran Canaria Arena.

El de Premiá de Mar se esforzó en hacer un buen boxear, pero el de Aragua se desfondó tras los dos primeros asaltos, se le notaba que apenas tenía aire, y eso hizo que el combate fuera bastante flojo, al punto que el venezolano se limitó a partir de ahí a no querer boxear y, tras tirar su bucal en varias ocasiones, terminó por ser descalificado.