El Granca repite entre los grandes del baloncesto europeo en un torneo de categoría internacional donde se exhibe la cantera. Fue hace unos días en tierras catalanas. Pero esta exitosa comparecencia en L'Hospitalet de Llobregat tiene precedentes. Ocho años atrás, el CB Gran Canaria inscribió su nombre como campeón en el torneo Nike International Junior Tournament Roma 2008. Un éxito que contó con la presencia de una generación de jugadores que despuntaban y, además, apuntaban maneras de buenos baloncestistas y que, a la postre, iban a dejar el pabellón grancanario bastante alto como lo fueron Ale López, Óscar Alvarado, Samu Domínguez, Christian Díaz, Jorge Santana, Bakary Konate y Fabio Santana, entre otros, dirigidos entonces por Víctor García.
Habrían de pasar esos ocho años reseñados para que el CB Gran Canaria volviera a tener presencia con su equipo de categoría júnior en el prestigioso Torneo Adidas Next Generation Tournament y hasta la localidad barcelonesa de L'Hospitalet de Llobregat acudían con las máximas ilusiones de realizar un decoroso papel ante escuadras de renombre de la élite del baloncesto de formación europeo.
A los jugadores dirigidos por Gabi Alonso les esperaban tres días intensos y exigentes de baloncesto ante los conjuntos de su categoría como los del Alba Berlin, Union Olimpija Ljubljana, FC Barcelona y Joventut de Badalona, por ejemplo. Y ésta era una buena oportunidad para dejar en un escenario de prestigio alguna muesca de buen baloncesto ante ojeadores (scouts) NBA, así como representantes de equipos europeos y de la propia liga ACB.
De los ocho equipos (dos grupos de cuatro), la del filial amarillo era la plantilla más joven que se presentaba a la cita y lo hacía con el siguiente roster de jugadores: Aleksander Balcerowosky, Luis Melían, Ignacio Ravelo, Javier López, Daniel Abrante, Gabriel Alonso, Carlos Cazorla, Jorge Almenara, Paulo Rodríguez, Biram Faye, Jovan Kljacic y Fam Babacar. El equipo técnico lo formaban Gabriel Alonso, Néstor Santana, Cristo Guerra y Lionel Montelongo.
Tras esta nueva presencia internacional, el filial amarillo ha regresado a la Isla con un buen bagaje tras haber ganado dos partidos frente al Alba Berlin (54-60) y Unión Olimpija (68-53), para sumar dos derrotas ante FC Barcelona (68-61) y Joventut de Badalona (93-79).
Con todo ello, el Gran Canaria finalizaba como tercer clasificado y desplegaba una excelente imagen a lo largo de los tres días de competición y con una generación, la actual de jugadores júnior (1999-2000) que han tenido la oportunidad de dejar la impronta de su juego ante grandes clubes de formación y cuna de jugadores y entrenadores con gran prestigio en el panorama europeo.
La idea y el objetivo de la entidad que preside Miguelo Betancor es la de solidificar la base y, para ello, la inversión que realiza la entidad de la calle Córdoba, en el Polígono de San Cristóbal, con su cantera es importante para un futuro, que se espera no sea muy lejano, en el que se vea reflejada la labor que se desarrolla en los equipos de categorías inferiores con la presencia de canteranos en el primer equipo del cuadro claretiano.
Si en la etapa de Himar Ojeda y Raúl Rodríguez se consiguieron grandes éxitos a nivel de cantera, no cabe duda alguna de que en la actualidad, la figura del satauteño Juanmi Morales al frente de la Dirección Técnica está siendo clave en el salto cualitativo de la entidad claretiana en la formación de los jóvenes jugadores y entrenadores.
A todo ello, se suma la aportación que realiza Santiago Santana así como la incorporación este curso de Manuel Hussein, como Coordinador Deportivo en la base y entrenador de entrenadores, lo que viene a redundar en un equipo técnico capaz de conseguir las mayores cotas y los objetivos trazados.
Los conocimientos y experiencia del técnico isletero serán también importantes para la progresión de la cantera. El staff técnico ha valorado en positivo la presencia durante los tres días de competición en tierras catalanas y no sólo a nivel de jugadores, donde se han enfrentado a otros competidores que son verdaderas apuestas de futuro en sus respectivos clubes.
A ello, se añade el aprendizaje adquirido en los entrenadores del club en este torneo que, cada año que pasa, va adquiriendo más y más prestigio.
