El Spar Gran Canaria, que cerrará la temporada como colista liguero -tiene una remota posibilidad de no serlo-, se despide hoy a partir de las 18.00 horas de sus aficionados en el Pabellón de La Paterna ante el Lacturale Araski, un equipo fuerte al que intentará vencer.

El equipo que dirige Pepe Carrión debería ganar los dos partidos que le restan para concluir la Liga y que el CREF ¡Hola! los perdiese para abandonar el último puesto, algo que parece imposible debido a que las isleñas visitarán en la última jornada al intratable líder Perfumerías Avenida Salamanca.

Equipo histórico

El conjunto grancanario dice adiós a la máxima categoría del baloncesto femenino nacional tras casi treinta años en la elite. Un descenso que en nada desmerece su casi inmaculado historial, donde además de ganar dos ediciones de la Copa de la Reina, fue campeón (1999) y subcampeón (2000) de la prestigiosa Copa de Europa Liliana Ronchetti y tiene multitud de subcampeonatos de Liga y otros importantes galardones.

Pero, como a casi todos los equipos humildes, la crisis económica ha ido mermando poco a poco su potencial. Y también las malas elecciones de jugadoras para reforzar su juego de las últimos años.

Con todo, las amarillas seguirán luchando para volver cuanto antes a la elite -igual puede suceder como el pasado curso, en el que descendidas en la cancha, obtuvieron el premio de la continuidad en los despachos, por no ascender ningún equipo debido a las dificultades económicas que tenían para jugar en la máxima categoría-.

Pero, pese a ello, el futuro es muy incierto para el club presidido por Domingo Díaz. De hecho, la entidad ha solicitado recientemente al Cabildo de Gran Canaria integrarse en la estructura del Herbalife Gran Canaria, algo que daría un poco de luz. La corporación insular, propietaria del club claretiano, se piensa la opción.

A la espera de que se aclare el futuro, sobre el partido de esta tarde Pepe Carrión señalaba que sus chicas han intentado seguir trabajando con profesionalidad, aunque varió esta semana la dinámica de entrenamientos, haciéndolos más divertidos al darle mayor protagonismo al balón, para que al menos disfruten en las sesiones preparatorias. "Esperamos acabar dando una alegría a la afición", señaló.

"El equipo ha mejorado a lo largo de la temporada, porque no nos han dado palizas y hemos perdido partidos en la prórroga y otros por muy pocos puntos. Hemos competido, aunque desde Navidades sabíamos que la permanencia estaba complicada. Además, nos ha faltado una jugadora que asumiese responsabilidades en los momentos claves", señaló.