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El espíritu de 2013

Las semifinales de ACB y Copa del Rey alcanzadas ese año marcaron un antes y un después en la vida del Herbalife Gran Canaria

La aventura del Herbalife Gran Canaria tiene marcado el año 2012-2013. Porque ese año el conjunto claretiano derribó dos barreras históricas. Anclados en la máxima competición desde 1995, cuando Pepón Artiles, Berni Hernández, Juanra Marrero, Jaume Morales o los desaparecidos Ramón Oliver y Jonathan Ojeda subieron al equipo desde la EBA para no volver a bajar nunca más, el Granca, por aquel entonces, ya sabía a clásico de la ACB.

Un fijo que tenía un tope. Siempre como sorpresa, como aquel equipo escondido que rendía por encima de las posibilidades que se le otorgaban al principio de la campaña, ya no resultaba tan extraño verle en la fase final de la Copa del Rey o colándose en el Playoff por el título. Pero los cuartos de final se le atragantaban siempre. No había manera de pasar al siguiente escalón.

Pero la historia cambió. En el año en el que el Granca celebraba su medio siglo de vida, que empezó en la cancha del colegio Claret en la calle Obispo Rabadán, el club que nació como un proyecto de diversificación formativa en una escuela, firmó la que se convirtió en la mejor campaña de su historia hasta el momento. Porque en 2013 y con Vitoria como testigo el Granca se metió por primera vez en las semifinales del Playoff de la Liga Endesa y de la Copa del Rey de baloncesto.

Aquel equipo que lideraba Pedro Martínez desde el banquillo tenía un apetito voraz por hacer algo realmente grande. En el eje nacional, la generación del 87: Tomás Bellas, Javier Beirán y Xavi Rey, que buscaban labrarse un nombre en la ACB; con los galones de la experiencia, Spencer Nelson y Eulis Báez; el acento de la casa, el de Roberto Guerra, Óscar Alvarado y Edy Tavares; el talento natural y los puntos eran cosa de Ryan Toolson y Jon Scheyer -que abandonó el equipo en abril para enrolarse en el banquillo de la Universidad de Duke-.

La conjunción del grupo fue total. Después de vivir en el alambre en la campaña 2011-12, donde el Granca firmó su permanencia en la ACB solo dos jornadas antes del punto final del campeonato, el Herbalife voló al inicio del curso. Con 12 victorias y cinco derrotas en las primeras 17 jornadas, el Granca se metió como cabeza de serie en la Copa del Rey. Otro hecho jamás logrado.

En febrero de 2013, el Granca por fin derribó el muro copero de cuartos. El Buesa Arena vio como el equipo de Martínez. Después de siete intentos fallidos, el Herbalife lo hizo. Los 22 puntos de Xavi Rey lideraron a un equipo que ganó por 74-62 al Bilbao Basket para caer en las 'semis' ante Valencia.

No obstante, aquella inyección de adrenalina lanzó al Granca también en la segunda parte del campeonato. Séptimos clasificados al término del curso regular, Vitoria y el Baskonia se cruzaron en su camino. Primero golpearon los vascos con un triple de Thomas Heurtel en el último segundo (57-56); después el Granca lo bordó para ganar en la prórroga en el Centro Insular (83-78) y agrandar su leyenda en el Buesa Arena (66-72).

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