Tenerife está en el epicentro de la Operación Soule impulsada por orden del juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz en coordinación con las fiscales Inmaculada Violán y Esther González. El vicepresidente de la Real Federación Española de Fútbol y presidente de la Federación Tinerfeña, Juan Padrón, y el secretario de esta federación regional, Ramón Hernández Baussou, fueron detenidos a primera hora de la mañana de ayer.

La sospecha es que ambos se habrían excedido en su labor de gestión del patrimonio de la federación, habrían favorecido la contratación de sociedades de las que obtendrían comisiones y formarían parte de una "operativa continuada de apropiación indebida" de fondos de la federación tinerfeña que habrían recalado en otra sociedad gestionada por ambos.

Por ello, los delitos de los que se acusa a los arrestados son administración desleal, apropiación indebida, corrupción entre particulares, falsedad documental y posible alzamiento de bienes, todo ello en relación con la organización de partidos internacionales. La denuncia del Consejo Superior de Deportes acusaba al máximo responsable de la RFEF de impulsar la celebración de partidos entre la selección española de fútbol y otras selecciones, consiguiendo contraprestaciones para la contratación de servicios y otras relaciones comerciales en beneficio de Gorka Villar.

La sede de la FTF, ubicada en la Avenida Benito Pérez Armas de la capital santacrucera, vivió un inusitado movimiento desde muy temprano. Hasta allí se desplazaron varias unidades móviles de la Guardia Civil, quienes acompañaron a Juan Padrón hasta el interior de las dependencias. Miembros de la Unidad de Control Operativo (UCO) accedieron al inmueble y durante horas estuvieron realizando las diligencias dictadas por el Juez Pedraz. Varias zonas fueron acordonadas y, en el exterior de la Federación, un sargento, un cabo y varios agentes hicieron guardia para que todo transcurriera según lo previsto. Sólo la entrada de unas botellas de agua y algunos cafés y la llegada de una funcionaria de correos alteró la normalidad.

En el interior, poco movimiento aunque trascendió de que los empleados fueron reunidos en la sala de juntas sin que pudiesen ocupar sus puestos habituales. Los vecinos, algunos desconocedores de la operación, preguntaron a los medios de comunicación desplazados hasta la sede federativa por lo que estaba ocurriendo.

Horas más tarde, los agentes dieron por concluido el registro y Juan Padrón y Ramón Hernández Baussou, quedaron a disposición del juez, que les tomará declaración en Madrid el jueves o viernes próximos.

No fue la única actuación efectuada en Canarias por orden del juez Pedraz. Agentes de la Unidad Central Operativa se personaron también en la sede de la Federación Interinsular de Fútbol de Las Palmas, ubicada en Las Palmas de Gran Canaria, para recabar documentación.

El presidente de Las Palmas, Antonio Suárez, acudió a la sede tras ser informado del registro, pero fuentes federativas subrayaron que la actividad en la citada sede continuó como es habitual y no se cerró al público.

La Operación Soule -que toma el nombre de un juego de pelota medieval- se extendió además de las dos federaciones canarias por Andalucía, Comunidad Valenciana, Baleares, Extremadura, Ceuta y Melilla. Villar tiene abierta otra causa judicial -instruye el caso un juzgado de Majadahonda- por un supuesto trato de favor a Recreativo y Marino, y en los últimos tiempos se ha visto obligado a devolver al CSD 1,2 millones como subvención para edificar una escuela de fútbol en Haití que nunca se hizo. Pese a la devolución, el caso sigue abierto.