El vicepresidente económico de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Juan Antonio Padrón Morales de 82 años, detenido en el marco de la Operación Soule al ser investigado por la presunta autoría de los delitos de administración desleal, apropiación indebida, estafa, falsedad documental y corrupción entre particulares, habría transferido cantidades de dinero a la Federación Tinerfeña de Fútbol (FTF), de la que es su presidente, para luego desviar importes a la sociedad mercantil Tenerife Sport SL, que administra junto con Ramón Ángel Hernández Baussou, secretario general de la FTF. Una vez que Tenerife Sport SL, considerada en el auto del magistrado juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz como una "empresa instrumental" que "no tiene ni rótulos ni nada que permita la atracción de clientes, con mercancía apilada en cajas de cartón", recibía las transferencias desde la FTF, se desviaban diversas cantidades mediante el endoso de cheques a cuentas bancarias particulares de Padrón y Baussou. "El patrimonio de Tenerife Sport SL no solo se alimenta de fondos de la RFEF, sino de fuentes de financiación públicas", señala el auto.
Tenerife Sport SL es una sociedad que tiene como objeto social la "importación, consignación, exposición, compra y venta, al mayor o al menor, de ropa y prendas deportivas y la participación de casas comerciales", de la que es administrador único Juan Padrón Morales desde 2004. No obstante, en 2005, Padrón Morales vendió un año después las participaciones de esta empresa a dos de sus hijas, María y Elena Padrón. Dicha empresa representó a la marca Puma en Tenerife.
Pedraz sostiene que "ni la FTF ni Tenerife Sport SL han declarado pagos o ingresos mutuos a la Agencia Estatal de la Administración Tributaria" (AEAT), lo que "constituye una lógica presunción de que no habrían existido operaciones comerciales entre ambas entidades".
"Parece poco razonable que la FTF que preside Padrón Morales y cuyo secretario general es Hernández Baussou efectúe pagos a la sociedad mercantil que ambos dirigen. Sin embargo, constan en las cuentas bancarias de Tenerife Sport SL multitud de ingresos procedentes de la FTF", indica el auto.
Del estudio de las cuentas bancarias de Tenerife Sport SL "se observó el ingreso, desde 2011 a mediados de 2016, de una gran cantidad de cheques a nombre de la FTF por valor aproximado de 440.944 euros, muchos de ellos librados por el propio Hernández Baussou en representación de la citada federación".
Los beneficiarios de los mismos son diversas empresas u organismos, "pero con el denominador común de que el importe de los cheques acaba siempre ingresado en las cuentas de Tenerife Sport SL, mediante lo que parece ser la transmisión por endoso de la titularidad del cheque a esta última mercantil".
"El dato de interés o esencia de la operativa no es solo el mecanismo usado: transmisión del cheque mediante endoso o presunta falsificación de éste, sino el constante flujo de dinero desde la FTF a la sociedad mercantil dirigida por ambos investigados de dicha federación".
Cheques para sí mismo
Para el juez, estas operaciones "sin aparente causa, resultan sospechosas y tras ellas pudiera subyacer la apropiación indebida de fondos de la FTF, máxime si se toma en consideración que en todos los casos la representación de la federación en la emisión de cheques y la del último beneficiario de los fondos recae en la misma persona, Ramón Hernández Baussou, y la existencia de indicios de falsedad en varios de estos documentos".
"Muchos de estos cheques han sido ingresados cuando el saldo en la cuenta de Tenerife Sport SL era negativo", recoge el auto, que habla también de que Padrón "ha podido favorecer a la entidad Estudio 2000 SA, como proveedora de determinado material o servicios a la RFEF, obteniendo beneficios al conseguir que parte de los fondos federativos pasen a su patrimonio particular a través de operativas societarias complejas".
En total son más de 36,5 millones de euros que habría abonado la RFEF por material deportivo a Estudio 2000 SA durante siete años, pagos que investiga ahora la Justicia como una de las ramas de un árbol que durante casi tres décadas no dejó de crecer a la sombra del presidente de la RFEF, Ángel María Villar, también detenido en la operación.
El auto de Pedraz, respecto de Juan Antonio Padrón Morales, señala que la RFEF "ha venido adquiriendo ropa deportiva a la sociedad Estudio 2000 SA, empresa que desde hace años representó a la marca Puma en España hasta que rompió sus relaciones con dicha marca en 2010 y comenzó a representar a Pony". A pesar de la ruptura comercial de dicha sociedad con la marca de ropa deportiva Puma, la RFEF decidió seguir comprando ropa deportiva a esta empresa por la "amistad manifiesta que une al presidente de esta sociedad, Vicente Bernad Vico y Juan Padrón".
Sin concurso
Según se sostiene en el auto, el acuerdo de compraventa de ropa deportiva "no fue ofertada por la RFEF a ninguna otra empresa" como correspondería hacer con cualquier concurso de suministro a proveedores que contratan con entidades públicas. El auto recoge que dicho material deportivo "se ha venido suministrando como equipación para los árbitros" o "se manda a las federaciones territoriales de fútbol" que "no saben qué destino darle" por lo que se ha "encontrado en muchos casos las prendas apiladas sin darle uso".
En este sentido se señala en el documento al que ha tenido acceso la opinión de tenerife que "no consta" que la adquisición de ropa deportiva a Estudio 2000 SA dirigida a "vestir" al colectivo arbitral por la RFEF y a las selecciones de las federaciones territoriales, haya sido ofertada "respetando los principios de competitividad", "ni queda determinada la necesidad del gasto anual que se realiza". Añade que "existen indicios" de que el contrato suscrito con Estudio 2000 SA "excede de las necesidades reales de la RFEF, pudiendo ocasionar un perjuicio al patrimonio federativo además de permitir el lucro de dirigentes de la RFEF".
El auto de investigación y por el que se ha dictado prisión para el presidente de la RFEF, Ángel María Villar, su hijo y asesor jurídico de la entidad, Gorka Villar; el vicepresidente económico, Juan Antonio Padrón Morales, y el secretario de la FTF, Ramón Ángel Hernández Baussou, en este último caso eludible bajo el pago de una fianza de 100.000 euros -que ya hizo efectiva ayer-, recoge también la "amistad" que une al presidente de la sociedad Estudio 2000 SA, Vicente Bernad Vico, con Padrón Morales. En este sentido se detalla, como muestra de ello, es que el hijo del primero "está contratado por la Fundación de RFEF, siendo el único monitor de la escuela de fútbol de dicha fundación que ha entrado con un contrato laboral fijo, pese a ser el último o uno de los últimos trabajadores que ha entrado a formar parte de la misma como personal".
Favores
El magistrado subraya la "existencia de elementos" para considerar que Juan Antonio Padrón Morales, en su condición de vicepresidente económico de la RFEF y "arropado" por Villar, "ha podido favorecer a la entidad Estudio 2000 SA como proveedora de determinado material o servicios a la RFEF, obteniendo beneficios al conseguir que parte de los fondos federativos pasen a su patrimonio particular a través de operativas societarias complejas".
En este sentido, se expone que la entidad Estudio 2000 SA fue constituida el 7 de febrero de 1974 y tiene como objeto social el comercio al por mayor de textiles, habiendo sido la titular registral de la marca Puma hasta finales del año 2010 y siendo, desde entonces, la titular de la marca Pony hasta la actualidad. Esta sociedad está administrada por los hermanos Fermín y Vicente Bernad Vico en la condición de consejeros delegados y el segundo, además, es presidente de la misma.
Al entramado societario se une la empresa matriz, Fervi Spain SL, dedicada al alquiler de bienes inmobiliarios por cuenta propia. Los dos hermanos figuran como administradores de la sociedad desde 2006.
La relación personal existente entre los responsables de Tenerife Sport SL y Estudio 2000 SA "habría permitido que Juan Padrón Morales, en su condición de gestor y máximo responsable de los fondos de la RFEF, con el conocimiento y consentimiento de Ángel Villar, favoreciese la continuidad a lo largo de los años de determinados contratos de suministro de material deportivo a favor de Estudio 2000 SA", lo que ha beneficiado a dicha sociedad, cuyos responsables, los hermanos Bernad Vico, han devuelto los "favores".
El auto judicial enumera, en este caso, algunas de las operaciones que se mantienen bajo la lupa judicial por las sospechas de irregularidades. Así, contratando Estudio 2000 SA con la sociedad Tenerife Sport SL se lograba que parte de lo percibido del patrimonio federativo revertiera al propio tiempo a Juan Antonio Padrón Morales y a Ramón Ángel Hernández Baussou, que figura como director gerente de Tenerife Sport SL, compensando luego mediante operaciones crediticias a Juan Padrón.
La Unidad de la AEAT adscrita a la Fiscalía Anticorrupción y los informes emitidos por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, desprenden que la RFEF ha efectuado pagos a la citada sociedad mercantil controlada por los hermanos Bernad Vico, entre 2009 y 2016, por un importe total de más de 36,5 millones de euros. Según los informes entregados a la Audiencia Nacional, dichos gastos provienen de un contrato de suministro de material deportivo concertado con dicha empresa, "cuyos administradores están vinculados por razones de amistad con Juan Padrón".
A partir de 2011, y pese a que la sociedad mercantil rompe su relación de representatividad para España con la marca Puma, la RFEF continúa la relación de suministro de artículos deportivos con esta empresa, manteniendo el mismo volumen de negocio que en ejercicios anteriores. De hecho, en los informes se describe cómo Estudio 2000 SA concentra el 85% de sus beneficios en el suministro a la RFEF e incluso llega a aumentarlos hasta el 99%, cuando a partir de 2013 se convierte en prácticamente la única entidad a la que le suministra material.
Estudio 2000 SA disminuye el número de trabajadores y empresas a las que paga, encontrándose entre éstas sociedades con las que deja de operar las de consultoría, limpieza, telefonía, transporte o suministros eléctricos, así como la sociedad Fervi Spain SL. A partir de 2012, "resalta" con diferencia como la destinataria mayoritaria de los pagos efectuados por Estudio 2000 SA, es la sociedad Distrisa SL, empresa que comercia las prendas deportivas de la marca Pony.
Así, Distrisa suministraba las prendas deportivas a Estudio 2000 SA quien vendía a la RFEF dichos artículos. La RFEF pagaba a Estudio 2000 SA y ésta a su vez reembolsaba el dinero a Distrisa, sin embargo, por el camino desaparecía parte de ese dinero que presumiblemente se destinaría al pago de comisiones. Sobre ello, los informes analizan los pagos declarados entre los años 2012 y 2016 y se señala que Estudio 2000 SA demanda equipación deportiva de la marca Pony a Distrisa por la que se paga 3,15 millones de euros. Recibido el producto abona 60.000 euros a una empresa de transporte para que la reparta y las prendas llegan a las federaciones territoriales. La RFEF paga a Estudio 2000 SA cinco millones de euros.
Desde 2013 más del 99% de los ingresos de Estudio 2000 SA provienen de la RFEF, por lo que "puede afirmarse que dicha mercantil subsiste gracias a la RFEF". Analizado el saldo de 15 cuentas bancarias de esta sociedad mercantil, se comprueba que a finales del año pasado arrojaba un resultado cercano a los 15 millones de euros.
La investigación pone en evidencia que la persona que "facilita" y "mantiene el vínculo en el tiempo" con esta sociedad, máxime existiendo una duda razonable sobre la verdadera necesidad del continuo abastecimiento de ropa de la marca Pony por parte de la RFEF, sería Juan Antonio Padrón Morales "en base a los antecedentes de su pasada relación con Estudio 2000 SA y la productora audiovisual Amanecer Latino SL", de la que su hijo, Paco Padrón, es administrador único.
