El Rocasa amplía su palmarés. El conjunto del barrio de Las Remudas se consagró con su cuarto título en toda su historia - tras las dos Copas de la Reina y la Challenge Cup de la EHF- y amplía su etapa dorada. La Supercopa conquistada en Vigo ante el Mecalia Atlético Guardés, campeón de la Liga Loterías, (26-28) abre la temporada para el equipo de Antonio Moreno con otra copa para sus vitrinas después de haberlo intentado en tres ocasiones previas. Pero si hay algo que lleva escrito el Rocasa es su capacidad para volver a intentarlo una y otra vez más.

¿Cómo le iban a sentar los cambios en la plantilla al Rocasa Gran Canaria? ¿Podrían mantener su gen competitivo y calidad? Quizá esas eran las dos primeras grandes preguntas que tenía que resolver ayer el conjunto de Antonio Moreno, que afrontaba su segundo curso al frente del equipo en esta nueva etapa en la banda. Y esa cuestión a resolver, que no resulta un asunto menor para un club acostumbrado a ganar en los últimos años, tenía como primera parada un partido por un título: la Supercopa frente al Atlético Guardés, campeón de la Liga Loterías el curso pasado.

El choque empezó bien para el conjunto teldense. Se puso por delante en el primer parcial (1-2, min.7) y aguantó los primeros dos minutos en inferioridad. Una ventaja que consiguió ampliar hasta los tres goles de renta (1-4, min.9). La seria defensa del Rocasa desconectó, de entrada, el ataque de un Guardés errático.

Habían pasado ya diez minutos hasta que las gallegas consiguieron su primer gol de jugada (2-4, min.11). Una buena muestra de que el Rocasa estaba apretando los dientes en su propia cancha. Eso, unido a la letalidad que enseñó el equipo de Moreno en el otro lado del campo y la aparición de Silvia Navarro abrió un parcial de 0-3 que elevó la ventaja a los cinco goles (2-7).

Cinco goles de renta que se mantuvieron paulatinamente al ritmo del cronómetro: 2-7, 3-8, 4-9 y 5-10. El Rocasa dominaba y ampliaba hasta el 5-11 (min. 16) gracias a otro gol de María González, excelente en la dirección de un partido que el Rocasa tenía donde quería. La defensa mixta que planteó Guardés tampoco inquietó demasiado al Rocasa, que conservaba su amplia renta en el marcador (6-12, min. 19.), forzando pérdidas y con Silvia Navarro a lo suyo: desesperar al contrario con sus paradas -hasta cinco pasados los primeros 23 minutos de partido-.

Solo África Sempere desde los siete metros espabiló a las suyas para abrir un parcial de 2-0 (8-12, min 24.) de un Rocasa que perdió algo de clarividencia en sus ataques y algo de la profundidad en la brecha que había abierto mediado el primer acto. De hecho se escaparon esos cinco goles de renta, aunque las teldenses se marcharon al descanso con cuatro tantos de ventaja (10-14).

La tendencia creciente del Mecalia Atlético Guardés continuó en la reanudación con golpes rápidos que revolcaron el marcador. Si en la primera parte la diferencia osciló entre los cinco y seis goles, las fuerzas se igualaron para bajar esa distancia hasta los tres y cuatro goles (14-18, min. 37).

El intercambio de golpes fue feroz. El Guardés subió la línea defensiva y se bajó al barro. El Rocasa sobrevivía al empuje local y se recomponía poco a poco hasta recuperar esos cinco goles que le sentaron de lujo al Rocasa (15-20, 16-21 y 17-22). Se sentía dominador el Rocasa, apoyado en los galones de Tiddara Trojaola, Lissandra Lusson y María González. Fue precisamente la de Tejina quien devolvió al Rocasa su máxima renta del partido, seis goles que dejaban la Supercopa muy de cara para las de Telde (17-23, min. 43).

Una máxima que Lusson, infalible en los siete metros, elevó a los siete tantos (17-24, min.44), suficiente para que el Rocasa llevara la final por la senda que buscaba. No obstante, el Guardés se apuró a pelar contra el reloj y dio algunos bocados al marcador (22-26, min.56). Unos mordiscos que se convirtieron en un aviso más que serio después de que Jennifer Gutiérrez anotara un penalti a falta de tres minutos ante un Rocasa en inferioridad (23-26, min.57).

Esa alerta la desconectaron Mela Falcón y Tiddara Trojaola, la mejor del Rocasa en la Supercopa con ocho goles. El Atlético Guardés pudo maquillar el marcador hasta el 26-28. Un resultado que otorga otro título más para un Rocasa que ha despejado esa pregunta con la que inició el partido. Porque este equipo aún tiene hambre de victoria y ganas de dar más guerra.