Nació en 1920 en la calle Sagasta del Puerto de La Luz, muy cerca del Mercado del Puerto y la Playa de Las Canteras. Una zona tradicionalmente futbolera y donde tenían su sede históricos clubes como el Porteño y el Victoria. Desde muy corta edad Pacuco conoce el mundillo futbolístico del Puerto pues su padre, Pancho Jorge, era un conocido jugador de los inicios del fútbol en la isla de Gran Canaria y uno de los fundadores del Real Club Victoria junto a Gonçalves, Pepe Prada y otros. Debido a la práctica deportiva de su padre, siendo un niño de apenas cinco años acudía al Campo España como "mascota" del Victoria. El primer equipo al que llega para competir es el Hespérides del Puerto donde juega en 1937 junto a Polo, Cástulo, Quique y otros.

Durante la guerra, en 1938 marchó a La Coruña.Jugó dos partidos con el Deportivo que pretendió su fichaje. Pudo mas la decisión de su familia de que regresara a Las Palmas, que la mediación de su amigo Hilario Marrero, jugador deportivista entonces, para que se quedara en el fútbol nacional. No quiso fichar en equipos de la Península y tras la contienda regresa a Las Palmas. Recibió ofertas del Ceuta que rechazó. El histórico Real Victoria lo incorpora en 1939 y es con los blanquinegros con los que alcanza las cotas deportivas más altas de su historial.

Jugador de refinada técnica y combatividad, era un malabarista del balón. De excelentes condiciones físicas y grandes dotes en el juego como la velocidad , el toque y la potencia en el disparo; características que presumía de haberlas aprendido jugando en la playa. Tenía todas las condiciones de los grandes futbolistas.

Jorge atravesó un par de años en los que la admiración en las gradas se concentró en su nombre. Sus nada comunes cualidades se hacían patente en cada actuación. Admirable era aquella habilidad tan suya de "parar el balón en el aire, suavemente, sin aspavientos, como una mariposa que se posa en una flor; así quedaba el balón en la punta del borceguí para efectuar el cambio rápido y colocar la pelota, como temiendo lastimarla, lejos del alcance del meta o al compañero mejor situado". Admirado por su juego y por sus valores deportivos y humanos, pronto se convierte en un ídolo popular cuando el club albinegro se proclama Campeón de Canarias. Tras el primer round del Campeonato de Canarias en 1944, Jorge estuvo afectado de una enfermedad que le debilitó enormemente, y pasó una temporada en el campo descansando y reponiendo fuerzas. Se reincorpora ese mismo año y ante el Atlético Aviación en el mes de julio vuelve a brillar.

En los años que estuvo como "victorista" se alineó junto a grandes futbolistas que destacaron en el fútbol español. Junto a él en el Victoria hicieron su debut importantes valores como Silva, Torres, Polo, Mujica, Gallardo, Miranda, etc? y tuvo en frente con sus eternos rivales "marinistas" otros como Victoriero, Farías, Sanabria, Molowny, etc. Todos ellos en pocos años pasaron a jugar en la Primera Divisón del fútbol español, a donde sin duda hubiera llegado Pacuco Jorge por su calidad.

En la temporada 1946-47 y después de haberse retirado, pues había dejado el ataque victorista casi junto con Luis Miranda, que retornaba a sus estudios en la Península, vuelve a calzarse las botas para jugar con el Gran Canaria. El Presidente Luis Rivero Noble le pidió que lo hiciera, y por su amistad jugó esa temporada con los "titulares" de la isla. En ese equipo se alineó con futbolistas como el portero Hilario Rodríguez, Tacoronte, Macías y otros, entrenados por Zacarías Betancor. Su última temporada como futbolista, la 1947-48, la hizo en el Hespérides del Puerto de la Luz en segunda categoría, tras lo que se retiró con 28 años. En toda la década en las islas, al contrario de muchos jugadores, cuya aspiración era que los fichara un equipo peninsular, Pacuco Jorge nunca quiso salir de su tierra.

Pacuco Jorge ha sido el portador de los valores del fútbol canario, no solo en los aspectos deportivos sino en los humanos. Ha transmitido a otras generaciones su ejemplo de caballerosidad y ciudadanía porteña. Un auténtico faro y estandarte del Real Club Victoria.