Mauri ha indicado, antes de entrar en la asamblea que ha comenzado a las 11.00 horas en la sede de CCOO en Palma y se alargará previsiblemente hasta las 18.30 horas, que espera "alguna idea imaginativa" de los trabajadores para hacer frente a la reestructuración de Spanair.

"Las primeras impresiones de la gente son bastante preocupantes, están muy asustados y, como los datos no se han concretado, no se sabe exactamente en qué centros de trabajo ni cómo se va a hacer la regulación de empleo: todo son preguntas", ha añadido en declaraciones a los periodistas.

Mauri ha reconocido que, en principio, los sindicatos no van a tener respuestas "a la mayoría de las preguntas", ya que hasta el día 22 de este mes la empresa no concretará datos en relación a los centros de trabajo a los que afectará el recorte.

El personal de vuelo acudirá a la asamblea durante la mañana y por la tarde se unirán los trabajadores de oficina y otros sectores afectados por el plan, que atañe, según Mauri, a "prácticamente todas" las áreas de la empresa.

Mauri ha apuntado que no se esperaba la noticia del recorte de la plantilla en unos 1.100 de los en torno a 3.800 trabajadores de la aerolínea, la cual "ha caído a todos por sorpresa".

"Creíamos que el plan iba a contemplar más medidas para ahorrar, para hacer la compañía más productiva, más viable, más competitiva", ha indicado Mauri, quien ha añadido que el número de trabajadores afectados "sigue pareciendo alto" y que, a su juicio, esta cifra "se puede reducir significativamente".

A la hora de aplicar el recorte, el presidente del comité de empresa ha abogado por hacerlo en "escalafones a la inversa", es decir, que los trabajadores más nuevos sean "los primeros en irse".

En cuanto a los empleados a los que podría afectar en Baleares, Mauri ha explicado que los datos extraoficiales los cifra en torno a 250, aunque ha aclarado que este número "puede variar bastante".

Tampoco ha gustado a los sindicatos el plazo de aplicación del plan de viabilidad de la empresa, que se intentará poner en marcha, según Mauri, en septiembre y concluir su aplicación, como máximo, en octubre.

"Las fechas son un poco apretadas", ha indicado Mauri antes de explicar que las organizaciones sindicales calculan que el proceso se puede alargar hasta finales de 2008.

Mauri también se ha referido a la posibilidad de que Spanair cambie su sede social, ubicada actualmente en Palma, a otra ciudad.

"Siempre se ha intentado, de alguna manera, enfocar el futuro de la compañía en un centro de trabajo que, en principio, tiene mas proyección, que es Barcelona", ha apuntado, una idea que "ahora parece que recobra fuerza de cara a un plan de reestructuración".

Según Mauri, los trabajadores se encuentran "otra vez con el fantasma" de que la sede se pueda trasladar de Baleares a Madrid o Barcelona.