Los bancos se han convertido en una gran inmobiliaria repleta de activos. El elevado endeudamiento y la imposibilidad de afrontar pagos por parte de los compradores han llevado a la banca a aglutinar en Canarias cerca de 20.000 inmuebles, entre pisos, locales comerciales y naves industriales. Las entidades financieras consultadas apuntan que entre un 6 y un 8% de las hipotecas constituidas en las Islas acaban anulándose ante la falta de liquidez de los adquirientes. Los bancos se han convertido, "muy a nuestro pesar, en las nuevas inmobiliarias", explica el responsable de una entidad financiera de Canarias.

El stock de viviendas devueltas, además, seguirá en aumento, continúa este profesional de la banca, que sostiene que "el ladrillo ha saltado por los aires". El denominado efecto sonajero (acción de devolver las llaves) provoca que "tengamos una bolsa de inmuebles a la que debemos dar salida". Entre las diferentes estrategias de venta está la rebaja de hasta un 30% de los pisos "porque necesitamos la mayor liquidez posible para que el sistema funcione". Los bancos se están adaptando a los nuevos precios que demanda el mercado porque no quieren ver menguados sus resultados.

El perfil de los titulares de inmuebles embargados es muy variado, pero sí se repite muchas veces el de un hipotecado en apuros con recursos mínimos y que coincide con población extranjera. En ocasiones "lo que origina el impago es que han pedido otros créditos como los préstamos al consumo, que han colmado el vaso", explica una fuente bancaria.