La Mutua de Accidentes de Canarias (MAC) negó hoy las acusaciones de fraude y dice que las conclusiones del informe de la Seguridad Social referente al ejercicio del 2007 son provisionales y "alteran la realidad", ya que se "realizan sin base".

La Secretaría de Estado de la Seguridad Social ha suspendido de forma cautelar las funciones del director gerente y de la subdirectora general por presuntas irregularidades en la gestión de la empresa.

La entidad, cuya sede en Santa Cruz de Tenerife está siendo registrada por la Policía Nacional desde las 10.00 horas, ha señalado en un comunicado que los resultados de este documento "no aportan datos concretos" y que tienen una clara finalidad de desprestigiar a la Mutua.

La entidad insiste en que las cuentas ponen de manifiesto el "equilibrio económico financiero" y la "regularidad contable" del organismo, y niegan que haya existido "entramado societario con intención de defraudar".

La Mutua subraya que "no existe una situación de gestión ineficiente" y anuncia que su equipo jurídico emprenderá "todas las medidas legales necesarias para salvaguardar la honorabilidad" de entidad.

Según datos extraídos de la memoria del 2008, la Mutua generó el año pasado unos ingresos de 74,5 millones de euros, gracias a las 19.000 empresas asociadas y a los 150.000 trabajadores a los que presta sus servicios.