El Consorcio para la Rehabilitación Turística del Sur de Gran Canaria prevé entre sus principales ejes de actuación la construcción de embarcaderos deportivos en la costa sur de Gran Canaria (entre Maspalomas y Bahía Feliz). En concreto, uno de estos atraques está previsto frente al Faro de Maspalomas, con lo que se facilitaría el acceso de las embarcaciones al corazón del bulevar de Meloneras. Otra infraestructura deportiva estaría prevista en la Playa de las Burras, según se desprende del Plan de Actuación del Consorcio del Sur, y que será la hoja de ruta a seguir durante los próximos años, según adelantó ayer el gerente de esta institución, José Fernández.
Además, este Plan de Actuación, que "será presentado a principios de noviembre" al consejo rector para su análisis, según apuntó Fernández, establecerá puntos de embarque y desembarque en los que 'taxis de agua', con pequeñas embarcaciones, se encargarán de trasladar a los turistas de un punto a otro del litoral.
El Plan de Actuación, que se adjudicó para su realización al ingeniero afín al PSOE José Francisco Henríquez por 51.000 euros, también establece un control del acceso a las dunas de Maspalomas. La intención del Consorcio, que sigue la estela propuesta en su día por el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana, es canalizar la entrada al parque natural. Esto supondrá que sólo se podrá acceder al mismo en visita guiada, aunque "no se cobrará el acceso", explicó Fernández.
La intención es recuperar los valores naturales de la costa y acondicionar esos elementos naturales para asegurar su libre uso y el disfrute públicos. Asimismo, otro de los ejes de actuación del Consorcio del Sur, insistió Fernández, incide en la idea de crear un espacio turístico racional, sostenible, habitable y confortable.
Para alcanzar este objetivo y trabajar en las zonas más obsoletas para las que está diseñado el Consorcio, el Plan de Actuación plantea la modificación del viario público, dando prioridad a la peatonalización de las áreas, acondicionando las calles para el uso de bicicleta y potenciado el transporte público no contaminante. La intención es penalizar al vehículo restringiendo su entrada a muchas zonas. "La sostenibilidad, junto a la restricción de la contaminación serán fundamentales para diferenciarnos y ganar calidad", expresó Martín.
