Es sin duda una de las polémicas de la semana, las declaraciones de Celestino Corbacho, ministro de Trabajo, en la televisión autonómica madrileña sobre la conveniencia de tener un plan de pensiones privado para complementar esta nos ha hecho retrotraernos a las sugerencias del anterior ministro de Economía Pedro Solbes sobre la conveniencia de contratar estos productos. ¿Qué hay que tener unos fondos para complementar nuestra jubilación? La pirámide poblacional y las dudas sobre el sistema público a largo plazo lo aconsejan. Puede tener muchas formas, un plan de ahorro, depósitos y por supuesto un plan de pensiones. En www.iahorro.com podemos consultar la amplia oferta disponible en el mercado español pero antes de nada debemos conocer sus características y limitaciones, tanto fiscales, financieras y a la hora de su rescate.

- Fiscalidad

Es la gran ventaja y atractivo a la hora de comercializarlo, la desgravación de un 15% de sus aportaciones año tras año, pero también ha perdido parte de su atractivo, ya que a la hora del rescate debemos pagar por todas las ganancias generadas desde que se contrató, pero si antes había una reducción del 40% (ganancia superior a 2 años) para todas las aportaciones desde el 2007 ha desaparecido, con lo cual se busca primar el cobro en forma de pequeñas rentas periódicas en vez de capital. Un depósito tributará por cada cobro de intereses, con lo cual el impacto es más dilatado en el tiempo pero no tiene desgravación ninguna.

- Rentabilidad

Es quizá la característica menos comentada, pero una de las más importantes. Como podemos ver en el cuadro adjunto las rentabilidades en todos los plazos son bastante exiguas. A pesar de las desgravaciones fiscales, tener un producto 15 años inmovilizado para apenas conseguir un 1% de rentabilidad no es un buen negocio, y con el riesgo de incluso perder capital como podemos también ver en los últimos datos de rentabilidad de los planes de pensiones. Los Garantizados tampoco ofrecen rentabilidades muy altas, con el inconveniente de altas comisiones.

Existen otros productos en los cuales depositar nuestros ahorros y que por lo menos en la mayoría del tiempo permiten superar la subida de precios y con total disponibilidad, cosa que no tienen los planes de pensiones.

- Rescate

Otro talón de Aquiles, además de la jubilación se puede rescatar por los herederos si muere el beneficiario, en caso de invalidez permanente y paro de duración prolongada. La crisis ha llevado a que se aligerará este último requisito, pero aun así, en circunstancias normales una persona que empiece su plan a los 35 años deberá esperar 30 años para disponer de su dinero. Lo que si permite, al igual de los fondos de inversión es su traspaso a otro, sin tener que pagar ningún coste ni tributar a Hacienda por ello.

¿Hay que ahorrar para el futuro? Sin duda, pero antes de tomar una decisión tan importante analizar los pros y contras y adecuarlos a nuestras necesidades fiscales y financieras.

Antonio Gallardo es el Director de Contenidos de www.iahorro.com