La Generalitat autorizó hoy dos de las fusiones puestas en marcha por las cajas de ahorro catalanas: por un lado la de Unnim -que agrupa a las cajas de Manlleu, Sabadell y Terrassa- y la de Catalunya, Tarragona y Manresa.

Las autorizaciones del Ejecutivo autonómico llegan después de los acuerdos de fusión adoptados por las asambleas generales de las entidades, que se celebraron el pasado 17 de mayo. Ambos procesos cuentan también con los informes previos favorables del Banco de España y la Comisión Nacional de la Competencia.

Según el Gobierno catalán, con estas fusiones, "el sistema financiero catalán se sitúa en unas buenas condiciones para hacer frente a la salida de la crisis".