Los hoteleros canarios se han puesto en pie de guerra contra el turoperador Thomas Cook, que pretende pasarles ahora la factura de la nube volcánica islandesa. La filial británica, que movió en las Islas en 2009 un total de 843.525 turistas y que acapara el 29,8% del mercado británico, ha comunicado de forma unilateral que aplicará a los hoteleros un descuento del 5% en las facturas pendientes de pago de julio y agosto y las que se generen hasta el 30 de octubre. ¿Por qué? Por las pérdidas de Thomas Cook durante aquellos meses de incertidumbre.

Según estimaciones patronales, esto supondría casi seis millones de euros menos en ingresos para los hoteleros. Thomas Cook Inglaterra comenzó el miércoles a comunicar de palabra a los hoteleros su intención de aplicar por su cuenta y sin negociación previa un recorte del 5% en los pagos de los meses de julio y agosto, así como los sucesivas que se vayan generando en septiembre y octubre.

El segundo operador más importante de Canarias argumenta ante los hoteleros que su decisión se debe a los costes causados por la nube volcánica islandesa. Sin embargo, los empresarios recalcan que también ellos asumieron aquel coste con generosos descuentos de hasta el 50%. La medida unilateral ha generado la indignación del sector, que se niega a aceptar esta acción que estiman "ilegal", por lo cual anuncia su intención de plantar batalla contra el turoperador. Thomas Cook trajo a Canarias el año pasado a un total de 843.524 turistas procedentes del Reino Unido, el 29,8% del total del mercado. Si se tiene en cuenta que el turoperador descontará en estos cuatro meses unos 20 euros por turistas, según las estimaciones iniciales realizadas por los empresarios, y que el mercado se ha reactivado, la factura supondrá en términos globales casi seis millones de euros en Canarias.

La medida no afecta exclusivamente a este destino, sino que también se está comunicando a los hoteleros de toda España, tal y como denunció ayer la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat).

Distintos empresarios consultados recriminaron esta actuación que califican de "ilegal, injusta y sin precedentes". Y el presidente de la patronal Ashotel, José Fernando Cabrera, advierte que el impacto económico será "muchísimo". A su vez, algunos compañeros critican que se haya comunicado de forma verbal para acallar a los hoteleros. Hay que tener en cuenta que el Grupo Thomas Cook es el segundo más importante en Europa, y que trajo al Archipiélago el pasado año a 1.891.791 visitantes, lo que supone un 23,7% de la cuota de extranjeros. Las patronales avisan de su intención de "plantar batalla" contra esta decisión.