El mercado de la vivienda en el Archipiélago se recupera, según los datos del Colegio de Registradores de la Propiedad, e incluso su crecimiento se coloca a la cabecera en el conjunto de comunidades autónomas y muy por encima de la media estatal- Durante el primer trimestre de este año, Canarias registró un incremento del 23,9 por ciento en la venta de casas, lo que supone el segundo mayor producido en todo el país tras La Rioja, que fue del 26,7 por ciento. En España, la venta de viviendas aumentó el 5,6 % durante el primer trimestre del año, hasta contabilizar 124.542 operaciones, frente a las 117.911 del mismo periodo de 2010.

El organismo explica en un comunicado que los cambios fiscales del IRPF llevaron a un aumento de la venta de viviendas a finales de 2010, parte de las cuales se han inscrito en los Registros de la Propiedad a lo largo de los primeros meses del presente año.

Por ello, pese al incremento experimentado en el primer trimestre del año, el Colegio de Registradores señala que ha habido un comportamiento mensual desigual, con un crecimiento en enero y febrero y una reducción significativa en marzo, lo que "podría anticipar un cambio de tendencia en posteriores trimestres". Del total de las viviendas vendidas en el conjunto del Estado entre enero y marzo último, 62.515 eran nuevas (el 2,9 % más) mientras que 62.027 fueron usadas (8,5 % más).

A medio plazo, señala el colegio de Registradores, las ventas de casas de segunda mano serán superiores a las nuevas, como consecuencia del progresivo agotamiento del excedente de obra nueva pendiente de vender y de la mínima iniciación de promociones.

En el primer trimestre, el importe medio del crédito hipotecario por vivienda se situó en 124.667 euros, el 3 % más que el mismo periodo de un año antes. Los bancos otorgaron un crédito hipotecario medio de 141.421 euros, cifra superior a la otorgada por las cajas de ahorro (115.777 euros) y otras entidades (109.730 euros), informa Efe. Durante los tres primeros meses del año se ha mantenido el tradicional predominio de los créditos de interés variable.