El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, instó hoy al Congreso a que le presente un plan "serio" entre las próximas "24 y 36 horas" para la reducción del déficit y que permita elevar el tope de la deuda.

"No deberíamos estar tan cerca de la fecha límite. Nos estamos quedando sin tiempo", dijo Obama en una rueda de prensa en referencia al 2 de agosto, fecha en la que EE.UU. puede suspender pagos si no se ha aprobado antes en el Congreso una elevación del límite de endeudamiento, establecido en 14,29 billones de dólares.

"Si me enseñan un plan serio, estoy listo para avanzar", expresó Obama ante los periodistas.

Durante toda la semana, líderes republicanos y demócratas se han reunido diariamente en la Casa Blanca para negociar un plan de reducción de déficit que permita equilibrar las cuentas fiscales de EE.UU., aunque sin éxito por el momento.

El presidente estadounidense instó a ambos bandos a dejar la política a un lado ya que es una "oportunidad única para hacer algo grande" y estabilizar la economía estadounidense, que cuenta con un abultado déficit.

Obama insistió en su respaldo a la propuesta más ambiciosa de reducción del déficit de 4 billones de dólares en la próxima década, a través de un "enfoque equilibrado" que incluya tanto recortes de los programas sociales como subida de los impuestos para los más ricos.

No obstante, se mostró dispuesto a considerar otras propuestas más modestas, de 2,4 billones de dólares, siempre y cuando incluyan ambos aspectos, algo que los republicanos descartan ya que no quieren aceptar una subida de impuestos.

También valoró el llamado "plan de contingencia", la elevación del techo de deuda mediante una ley que otorgue poderes especiales al presidente pero que luego pasaría al Congreso donde se debatirían los aspectos concretos, algo que Obama consideró como una solución a "corto plazo" y que no arreglaría el problema de fondo.