Alemania y Francia exigen retirar las ayudas a los países de la Unión Europea con un déficit alto como es el caso de España. La medida tendría unas importantes repercusiones para Canarias, una de las regiones españolas más beneficiadas de los sustanciosos fondos europeos. El Archipiélago recibe de Bruselas una media de 185 millones de euros anuales desde 2007 hasta 2013. Bruselas reportará una inversión total de 1.300 millones en ese periodo.

La Unión Europea financia el 15% de las inversiones autonómicas canarias que procede, principalmente, del Fondo Europeo de Desarrollo Regional. El denominado Feder sufraga carreteras, puertos, obras hidráulicas, de medio ambiente, de tratamiento de residuos sólidos y los parques tecnológicos, entre otras infraestructuras. Suponen más de 100 millones cada año. En segundo lugar está el Fondo Social Europeo, cuyo fin es el apoyar la estrategia de empleo y las acciones orientadas a mejorar el mercado laboral. Dispone de un importe anual en torno a los 40 millones.

La Comunidad canaria obtiene además financiación del Fondo Europeo de Desarrollo Agrícola, unos 15 millones anuales con la finalidad de modernizar y diversificar esta actividad. Asimismo, está el Fondo Europeo de Orientación y Garantía (Feoga-G), que ofrece una renta mínima, y el Feoga-O, que sirve para mejorar las estructuras de producción. También existe el Fondo Europeo de Pesca, que financia el desguace de barcos o la adaptación a actividades más sostenibles y mejoras generales del sector. Por último, está el Fondo de Cohesión, dotado con diez millones anuales y destinado a cofinanciar actuaciones relacionadas con el medio ambiente y transportes.

5.353 millones

La Unión Europea ha sido una especie de maná para el Archipiélago. Los pagos realizados por Bruselas entre 1986 y 2004 a las Islas, supusieron una inversión total de 5.353 millones de euros. En esos 18 años transcurridos, la inversión media anual alcanzó los 297 millones. La pérdida de la condición de Objetivo 1 por Canarias al superar la renta per capita mínima provocó su sustitución por la cuantificación económica del criterio de ultraperifericidad y la ampliación de la unión a los 25 socios. Así, a partir de 2007 y hasta 2013 la inversión anual de Bruselas a Canarias ha descendido en casi 110 millones, situándose en 185 millones, una cantidad todavía significativa.

En este proceso, las comunidades autónomas han ganado en protagonismo con las ayudas procedentes de la Unión Europea ya que han pasado de gestionar el 10,3% en los primeros años de la ayuda a situarse en un 35% a partir del 2007.

El Gobierno regional no quiere perder este auxilio vital y entre sus prioridades está el renegociar la posición de Canarias en la Unión Europea y la de sus instrumentos, es decir, los fondos europeos y el Régimen Económico y Fiscal, cuyos actuales marcos vencen en 2013.

"La agenda europea va a marcar una parte importante de este Gobierno", ha afirmado el consejero regional de Economía y Hacienda, Javier González Ortiz.

Sobre la cuantía a recibir desde Bruselas a partir de 2013, González Ortiz señaló que pretenden mantener las actuales cifras y defenderán que el fondo de las Regiones Ultraperiféricas de la Unión Europea debe permitir paliar las deficiencias que son estructurales a un archipiélago y que suponen un sobrecoste en la gestión de residuos, transportes, comunicaciones y servicios públicos.