- ¿Se han cumplido las expectativas previstas para la XXI Semana Nacional del Autocar y del Autobús?

- El encuentro ha resultado cumplir las previsiones hechas gracias al alto nivel profesional de los ponentes que habíamos seleccionado para las cuatro jornadas de trabajo que se han desarrollado durante estos dos días. El nivel de asistencia ha sido elevado dado el alto grado de interés y, además, hemos intentado cumplir con el lema de estas jornadas, Por una movilidad sostenible, con el fin de mejorar los servicios de transporte y hacerlos más sostenible desde el punto de vista económico, medioambiental y social.

- ¿Por qué esta apuesta por la sostenibilidad?

- La sostenibilidad es una necesidad de futuro desde el punto de vista de nuestra economía y, sobre todo, porque necesitamos introducir cada día más eficiencia en la gestión de los servicios. La iniciativa privada está dando una respuesta acertada a esta necesidad y creo que es una aspiración el llegar a las empresas públicas y privatizarlas en beneficio de los derechos de los ciudadanos.

- ¿A qué derechos del ciudadano se refiere?

- El transporte tiene un precio que no siempre lo cubre directamente el usuario sino que la Administración se encarga de cubrir una parte de los gastos a través de los impuestos. El ciudadano tiene derecho a saber, use o no el transporte público, lo que éste le cuesta y para ello debe conocer el importe que se destina de sus impuestos a subvencionarlo.

- ¿Cuáles son las conclusiones más destacadas de este encuentro del sector?

- Durante estos días hemos realizado un análisis económico de la difícil situación que atraviesa el sector. Entre algunas de las posturas, el profesor Ginés de Rus, que conoce muy bien el sector del transporte, nos ha animado a trabajar y luchar por conseguir una mayor eficiencia haciendo un llamamiento a los responsables públicos para que no se derroche en infraestructuras de transportes que luego no se van a utilizar, como es el caso del AVE que circulaba entre Toledo y Albacete, con cuatro expediciones diarias y desplazando al día a siete viajeros.

- ¿Cómo se ha tratado en estos días la relación entre el sector del transporte y la Administración pública?

- Tenemos una gran preocupación porque no sabemos cómo podemos cobrar de unas administraciones que no tienen dinero. Este es un serio problema porque la deuda que a nivel nacional mantienen las administraciones con el sector, teniendo en cuenta todas las especialidades de transporte, se podría cifrar en torno a los mil millones de euros. Es un problema porque las administraciones no se niegan al pago pero el sector es consciente de que no puede reclamar ya que no tienen dinero. Esperamos que con el nuevo Gobierno que surja tras las elecciones venga una nueva etapa en que se afronte esta situación.

- ¿Qué medidas se están tomando para afrontar estos impagos?

- Algunas administraciones están autorizando a los empresarios a reducir servicios con el fin de no incurrir en un coste mayor y, de alguna forma, gestionar con más eficiencia los pocos recursos que hay.

- ¿Qué opina sobre el tren que comunicará la capital grancanaria con el sur de la Isla?

- Considero que no es el medio más apropiado ya que tiene un coste bastante más elevado que el de la guagua. Lo que sí debería hacerse es potenciar el transporte público a través de carriles bus y plataformas exclusivas, prioridades semafóricas y aparcamientos disuasorios en los accesos a las ciudades con el fin de que éstas sean más habitables.