La economía española decrecerá el 1 % en 2012, según prevén los servicios de estudios de Bank of America y Merrill Lynch, que pronostican una "prolongada" recesión en los países del sur de Europa (España, Italia, Portugal y Grecia).

Según el informe del banco estadounidense la economía española habría crecido tan solo un 0,7 % en 2011.

De acuerdo con sus proyecciones, la economía caerá este año como consecuencia de un mayor deterioro de la demanda interna y de una importante ralentización de las exportaciones.

La entidad prevé que la demanda nacional aporte un punto de caída al PIB, en tanto que el sector exterior sólo contribuirá con siete décimas de crecimiento.

Dentro del sector doméstico, el consumo de las familias retrocederá el 1 %, en tanto que el gasto de las administraciones públicas disminuirá el 2 %.

El principal riesgo que el banco estadounidense señala es la posibilidad de que se produzca una nueva crisis de deuda soberana, ya que cree que los inversores internacionales están preocupados por la capacidad de España para hacer frente a su endeudamiento público.

Aunque los mercados están estables, considera que existen factores exógenos (como una posible bajada de la calificación de la deuda española o desvíos en el cumplimiento del objetivo de déficit) que pueden generar un nuevo episodio de volatilidad.

Según explica, nuevos repuntes de la prima de riesgo (el sobrecoste que España paga por obtener financiación en los mercados respecto a Alemania) podrían derivar en un mayor deterioro de la inversión y el consumo. EFE