La Canaria, uno de los primeros hoteles de lujo del sur de Gran Canaria, abierto hace ahora más de 30 años, volverá a abrir sus puertas este verano. El Grupo Dunas ha liderado la modernización de este complejo hotelero, transformado en aparthotel de cinco estrellas. "Para reformarlo hemos utilizado materiales con un nivel muy superior a cualquier producto de alta gama empleado en Gran Canaria", señala José María Tadeo, consejero delegado del Grupo Dunas.

Desde el esqueleto hasta la distribución de las habitaciones, cada rincón de La Canaria ha sido rediseñado para aportar la mayor comodidad y satisfacción posible a su clientela, que será preferentemente nórdica y de gran capacidad de gasto. "Este es un producto dirigido a un turista con alto poder adquisitivo, que cuando se aloja en un hotel busca estar mejor que en su casa, donde ya su nivel de vida es bastante alto, y por lo tanto es un cliente exigente", explica Tadeo.

Instalaciones deportivas, spa, restaurantes a la carta y varias piscinas forman parte de la oferta alojativa que el huésped puede encontrar en La Canaria, todo ello con vistas directas al mar. "Hemos incluido un supermercado con productos gourmet para que los clientes puedan comprar lo que deseen y prepararlo en la cocina de la que están dotadas todas las habitaciones", señala el consejero delegado de Dunas. Esta redistribución del espacio ha transformado las 249 habitaciones con las que el hotel contaba en su estructura en 125 apartamentos de alto lujo.

Alianza nórdica

El hotel La canaria fue adquirido por el Grupo Dunas en 2003, tras comprarlo a una cadena alemana (Steigenberger). En 2007 el grupo hotelero canario decidió ampliar sus miras y buscar la posibilidad de establecer una alianza con inversores nórdicos con experiencia en el negocio turístico, interesados en Gran Canaria como destino. "Nos interesamos por los nórdicos porque son países donde la renta per cápita es notablemente superior a la nuestra y por tanto podían reportar turismo de calidad", explica Tadeo.

Tras dos años de búsqueda, el Grupo Dunas consiguió establecer un acuerdo con un grupo de empresas nórdicas "dedicadas a invertir a nivel mundial en aquellos destinos que consideran factibles". Establecida la alianza, el Grupo Dunas, con el apoyo nórdico, se ha encargado de reformar íntegramente el complejo hasta convertirlo en un producto de alto standing para el mercado de esa área. Esta operación ha supuesto un gasto de 60 millones de euros, de los cuales la mitad se han empleado en llevar a cabo la transformación de La Canaria.

Tras 15 meses de trabajo, el Grupo Dunas y los inversores nórdicos entregarán este verano la gestión del aparthotel a la cadena Radisson. "Esta decisión se traducirá en un aumento de confianza porque teniendo a Radisson en Gran Canaria, el cliente nórdico confiará más en el destino, ya que es una empresa que les resulta conocida", explica el consejero de Dunas.

Radisson aplicará en su gestión el modelo del condominio americano, de manera que, de por vida, los propietarios del aparthotel cinco estrellas podrán hacer uso propio de las habitaciones o cederlas al disfrute de terceros, vía Radisson. Así se consigue además fidelizar a un turista con alto poder adquisitivo, bajo una marca paraguas que le genera una gran confianza. "Trabajamos en la misma línea que las instituciones en el sentido de que tratamos de promover la llegada de turismo de calidad frente al de cantidad, para que dejen beneficios en las Islas, porque esa es nuestra filosofía", afirma el consejero delegado del Grupo Dunas.

En este sentido, y siguiendo el lema el lema de que "lo que se hace en Canarias tiene que quedar en Canarias", la renovación del hotel ha servido para dar trabajo a 50 empresas isleñas subcontratadas para convertir en realidad lo que en principio era un proyecto. "Somos una empresa familiar netamente canaria cuya dirección facultativa y técnica también es canaria y eso ha generado confianza en los inversores a la hora de decidirse por Gran Canaria y por grupo Dunas, todo ello bajo la filosofía de la empresa que es honestidad, trabajo y futuro", añade Tadeo.