La primera jornada del paro convocado por el sector del transporte bloqueó el traslado de mercancías en Canarias. Ese fue el saldo de un primer día de movilizaciones, cuya convocatoria se mantiene fijada para toda esta semana y hasta el próximo domingo, 15 de julio. Un paro que no se altera pese a la mesa sectorial que se celebró ayer en la sede de Presidencia del Gobierno de Canarias en Las Palmas de Gran Canaria, en la que la consejería de Transportes emplazó a las distintas partes implicadas en las demandas de los transportistas.

Éstas son recurrentes en los últimos meses: la eliminación del tacógrafo (que entienden superfluo en Canarias y del que se sienten eximidos por la regulación europea), la asunción del transporte portuario en el actual marco normativo (salvo el transporte horizontal en contenedores), no tener que pasar la ITV con el vehículo cargado, cobrar las subvenciones a combustible que aún se deben o no asumir un gran recorte en los contratos del transporte escolar.

Bajo esas reivindicaciones se convocó una gran movilización el pasado mes de abril. Ahora, la Federación de Empresarios del Transporte (FET), y otras asociaciones representativas del transporte de mercancías y de pasajeros, se ha endurecido la protesta, que no descarta llevar aún más lejos de estos seis días si no obtienen satisfacciones.

Bloqueo en el Puerto

Cuando comenzó la Mesa del Transporte, en la que también figuraban representantes de otras administraciones (como la Autoridad Portuaria o el Cabildo de Gran Canaria, recaudador de las sanciones del tacógrafo), la salida del Puerto ya había sufrido el bloqueo de mercancías. El contenido de unos 400 contenedores se quedó dentro: unas 7.400 toneladas de mercancías sin reparto.

Y eso que en la jornada anterior (lunes), el recinto portuario vivió un inusitado tráfico de mercancías "como nunca antes se había visto", en previsión del paro que se iniciaba desde la medianoche.

La movilización, no obstante, no afectó al traslado de mercancías perecederas ("la fruta es algo sagrado", en valoraciones de los transportistas) o medicamentos. Además del transporte público de pasajeros y el traslado de ida o vuelta de turistas en el aeropuerto. Todos estos servicios fueron los respetados por el paro.

En la reunión, Gobierno canario y patronal se mostraron de acuerdo en transmitir "buenas sensaciones", pese a que la convocatoria del cierre patronal no se alteró lo más mínimo a la salida. El presidente de la FET, Agustín Espino, confirmó que el transporte de mercancías había quedado virtualmente bloqueado en el Archipiélago (en un día con piquetes informativos, que comprobaron que los supuestos traslados de alimentos, por ejemplo, consistían justo en eso y no en viajes de otra naturaleza).

Espino subrayó las demandas del sector, con especial hincapié en el tacógrafo (cuya regulación contempla sanciones de hasta 6.000 euros), o en el Puerto. "Los portuarios", apuntó, "han ido usurpando servicios a los transportistas". Y también se lamentó de que los camiones o guaguas tengan que pasar la ITV cargados. "¿Qué hacemos?, ¿buscar pasajeros para llevarlos a la revisión?", inquirió el presidente de la FET.

Por su parte, el consejero de Transportes del Gobierno de Canarias, Domingo Berriel, señaló que "nos alineamos plenamente con los transportistas en el asunto del tacógrafo", estando de acuerdo en su eliminación. En la actualidad, una comisión del Estado (que impone su uso) evalúa la posible revisión de su exigencia o bajo qué condiciones aplicarla. "Estamos insistiendo ante el Ministerio para resolver esta situación", apuntó el consejero.

El bloqueo aún no se ha traducido en carencias en el abasto. Los comerciantes y los mercados han hecho provisión de mercancías, advertidos por el paro. Sin embargo, la situación puede agravarse en días sucesivos.