Las pensiones contributivas subirán un 0,25% en 2015, el mínimo previsto en la última reforma del Gobierno, según el proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para el próximo año, que este martes se ha presentado en el Congreso de los Diputados.

Con esta revalorización, en línea con la del pasado año, y teniendo en cuenta también la previsión de incremento del número de pensionistas y la variación de la pensión media, el Gobierno prevé un gasto de prestaciones contributivas de 115.669,23 millones de euros, un 3,2% más.

Sumando prestaciones contributivas y no contributivas y clases pasivas, el gasto a destinar por la Seguridad Social será de 131.658,93 millones de euros, lo que supone un incremento del 3,3% respecto a 2014.

Así, en el ámbito no contributivo, el crédito destinado en el ejercicio 2015 para las pensiones de vejez e invalidez se eleva a 2.242,59 millones de euros, excluido el País Vasco y Navarra. En este gasto también se incluye la revalorización del 0,25%.

Baja la aportación al complemento de pensiones mínimas

La aportación del Estado para financiar complementos de pensiones mínimas será de 7.563 millones de euros, incluidos los gastos de gestión, un 0,9% menos.

En el Régimen de Clases Pasivas del Estado, en el que se integran las pensiones de los funcionarios, el gasto previsto es de 121.970 millones de euros, un 4,7% más que el presupuesto inicial de 2014.

Para los perceptores de las Ayudas del Fondo de Asistencia Social (FAS), que hayan optado por no integrarse en las pensiones no contributivas, se ha presupuestado una cantidad de 10,89 millones de euros.

Bajo la denominación de Pensiones de Guerra se incorporan aquellas pensiones e indemnizaciones que tienen su origen en la Guerra Civil. Para el ejercicio 2015, los créditos destinados a esta rúbrica se elevan a 214,89 millones de euros.

El mayor gasto, en jubilación

Por tipos de pensión, las de jubilación son las que más gasto suponen, con 80.816,3 millones de euros, seguidas de las de viudedad (20.776,6 millones), las de incapacidad (12.028 millones), las de orfandad (1.762,6 millones) y aquellas en favor de familiares (285,4 millones).

Por otro lado, la dotación asignada en los Presupuestos de 2015 para proteger situaciones de maternidad, paternidad, riesgo durante el embarazo y riesgos durante la lactancia natural desciende un 3,7%, hasta los 2.098,2 millones de euros.

Asimismo, se destinarán un total de 4.942,7 millones de euros, un 1,3% más, para el pago de subsidios por incapacidad temporal, prestaciones que concede la Seguridad Social a través de las entidades gestoras o de las mutuas por bajas laborales derivadas de enfermedades comunes o profesionales, y accidentes no laborales o laborales.

El Gobierno precisa que en los últimos años se ha producido una notable disminución del gasto en esta prestación, pero que para el próximo año se estima un incremento del gasto coherente con la evolución prevista del empleo.

Por otro lado, para el próximo año está previsto un crédito para el sufragar las prestaciones por cese de actividad de los autónomos por importe de 11 millones de euros.

Cae el gasto en prestaciones de garantía salarial

Por último, el programa de Prestaciones de Garantía Salarial incluye el abono a los trabajadores tanto de los salarios pendientes de pago a causa de insolvencia, suspensión de pagos, quiebra o concurso de acreedores de los empresarios, como de las indemnizaciones reconocidas como consecuencia de sentencia o resolución administrativa a favor de aquellos a causa de despido o extinción de contratos.

La dotación presupuestaria para 2015, destinada a estas actividades asciende a 1.064 millones de euros, un 22,7% menos, de los que 1.036,5 millones de euros corresponden al pago de prestaciones del Fondo de Garantía Salarial (Fogasa).