España se enfrenta a trece demandas de arbitraje internacional por vulneración de los principios recogidos en la Carta de la Energía, el 20% de todos los litigios mundiales por este motivo, en tres instancias diferentes. Todas estas demandas están relacionadas con los cambios legislativos en el sector de las renovables, que han reducido progresivamente la retribución de estas plantas, según la información ofrecida por la Carta de la Energía.