La lista de reformas que el Gobierno griego está negociando con sus acreedores contempla medidas que aportarán al Estado ingresos adicionales por valor de 3.700 millones de euros, procedentes básicamente de medidas fiscales y de privatizaciones, según la prensa.

Sin embargo, las instituciones internacionales que forman parte del "Grupo de Bruselas" han pedido hoy a Grecia que detalle sus propuestas de reformas, dado que son "demasiado vagas" como para cerrar la lista definitiva que Atenas deberá aplicar para acceder a los fondos pendientes del rescate.

"Se necesita más trabajo a nivel técnico, más detalles son necesarios, lo que es responsabilidad de la parte griega dado que sus propuestas eran demasiado vagas", explicaron a Efe fuentes europeas.

Las discusiones entre Grecia y las cuatro instituciones del "Grupo de Bruselas" -que cuenta con representantes de la Comisión Europea (CE), el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Central Europeo (BCE) y el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE)- comenzaron el viernes, después de que Atenas anunciara que había cerrado ya su lista de reformas.

El Gobierno liderado por Alexis Tsipras se había comprometido con sus socios a enviar hoy la lista completa de reformas. Sin embargo, al final no se ha cumplido este anuncio ni en forma ni en sustancia: las negociaciones se han prolongado durante el pasado fin de semana, pero no sobre una lista detallada, sino sobre "algunas propuestas" que no bastan para recibir el visto bueno de los acreedores, según las fuentes europeas.

El paquete de privatización del puerto de El Pireo y los 14 aeropuertos regionales aportará, según las filtraciones del ministerio de Finanzas, ingresos de unos 1.500 millones de euros.

El resto de los ingresos provendrán de la lucha contra la evasión fiscal y de las iniciativas para promover la devolución de las deudas a Hacienda y a la Seguridad Social, como lo son la amnistía fiscal y la ley que permite el pago en cuotas, aprobadas en el Parlamento hace diez días.

Según los cálculos presentados a Bruselas, unos 725 millones de euros provendrán de la recuperación de dinero negro de depósitos en el extranjero, 350 millones de la lucha contra el fraude en el IVA (impuesto al valor añadido), 270 millones de la modificación de los tipos del impuesto a la renta y 300 millones de la devolución de las deudas a Hacienda.

Además, el Gobierno de Tsipras espera recaudar 600 millones de la venta de las licencias de televisión privada. En los últimos años, las televisiones privadas griegas han funcionado ilegalmente, pues no pagaban las licencias correspondientes de emisión.

Hoy se han retomado las conversaciones, pero el acuerdo aún está lejos de concretarse. "No es fácil, como todos sabemos, pero trabajamos con el mismo espíritu y éste es el de tener éxito", aseguró el comisario europeo de Asuntos Económicos y Financieros, Pierre Moscovici.

Subrayó que este "éxito" incluye la permanencia de Grecia en la zona del euro con unas reformas que cumplan con los compromisos pactados por el anterior Gobierno, pero también con la voluntad del pueblo griego, que en enero pasado dio la victoria en las urnas al izquierdista Tsipras.

Según la Comisión Europea, "todavía no se ha llegado" al momento en que se logre un acuerdo entre las cuatro instituciones acreedoras y Grecia sobre una lista de reformas detallada que el país se comprometa a aplicar, en palabras de su portavoz Margaritis Schinas.

Con este ritmo, todas las fuentes descartan que los ministros de Economía y Finanzas de la zona del euro (Eurogrupo) puedan mantener un encuentro esta semana en el que dar su aprobación a la lista de reformas, paso imprescindible para que Atenas pueda acceder a los 7.200 millones de euros que quedan pendientes del rescate al país.