La decadencia del envío de cartas es una realidad palpable en el sector de la correspondencia postal. Cada vez menos individuos utilizan este método para comunicarse o realizar algún trámite burocrático, entre otras funciones. Actualmente, con Internet, comunicar consume escasos segundos. El mensaje se ejecuta de forma rápida, eficaz y barata, lo que ha ocasionado que el envío convencional quede desfasado. Correos calcula que, a nivel estatal, esta disminución representa alrededor de un 30%, cifra cuestionada por Comisiones Obreras (CCOO), sindicato mayoritario en la compañía, que la sitúa entre un 6% y un 10%.
La reducción de la plantilla de trabajo que ha sufrido la entidad en los últimos años es un aspecto que preocupa extremadamente a los sindicatos. Este problema, consecuencia directa de la decadencia del envío de cartas, produce una disminución del trabajo de los carteros, que pueden hacer sus funciones en menos tiempo, con lo que una sola persona abarca más kilómetros.
La zona 7 de Correos, formada por las dos provincias canarias, tiene un volumen de trabajadores de 2.300 empleados repartidos en 56 centros de reparto, 109 oficinas y dos centros de tratamiento automatizados. Los datos muestran una reducción de plantilla en las Islas que, según CCOO, se corresponde con un total de 1.200 puestos menos desde 2010. 85 puestos con reducción estructural y 155 contratados menos. "Esto ha ocasionado que en diferentes puntos de Gran Canaria se haya reducido el servicio a uno o dos días por semana, así como retrasos, acumulaciones y colas en diferentes oficinas de Las Palmas", explicó Laura González Jaizme, secretaría provincial de CCOO Correos en Las Palmas. La disminución de salario a nivel estatal es un tema que también preocupa a los sindicatos. CCOO exige "una subida de los salarios que, en los últimos años, ha bajado en total un 5%. Queremos una subida del 1% este año y 1,5% para 2016, con igualdad entre funcionarios y laborales", expresó González.
El sindicato mayoritario en Correos ya ha convocado diferentes huelgas y manifestaciones, y asegura que no van a parar hasta que "se procese el convenio con Correos que lleva más de tres años bloqueado". "Estas reducciones de plantilla suponen que no se cubran las bajas, así como las jubilaciones, entre otros casos. Por ello, el servicio postal se ve afectado de forma negativa, porque no podemos mantenernos con menos de la mitad de los empleados", explicó la secretaria provincial. Añadió, además, que "toda empresa consolidada con más de dos años de beneficios tiene la obligación de llevar a cabo la reposición de puestos de trabajo, y Correos es una de ellas". Según González, en la última reunión celebrada para poner solución al problema, "se llegó a un acuerdo verbal de hacer esta consolidación, pero se espera que el acuerdo pase por escrito y se firme en el próximo mes de noviembre, antes de las elecciones y el cambio de Gobierno". "En caso de no hacerse, se volverá a las manifestaciones", completó.
El sindicato hace especial hincapié en que Canarias en general y el ámbito rural en particular pueden ser los primeros afectados: "Hay que tener en cuenta la situación ultraperiférica de Canarias, donde las empresas privadas del sector no se pelean por nosotros. Se necesita un servicio postal universal que llegue de forma eficaz a toda Canarias, sin olvidar la zona rural, puesto que las entidades privadas no irán porque están centradas en las grandes ciudades, y esta necesidad debe estar cubierta".
En respuesta, Correos asegura que la reorganización necesaria de los recursos para mejorar la situación por la decadencia de las cartas se hace de una "manera natural, aprovechando jubilaciones, traslados voluntarios a otras Administraciones, etc, sin aplicar medidas traumáticas. En Correos no se ha despedido a nadie y el compromiso de la empresa es mantener los puestos de trabajo necesarios para prestar el mejor servicio a todos los ciudadanos".
Añade además que "en estos momentos la empresa y los representantes sociales están en continua negociación en todos aquellos aspectos de mejora de las condiciones laborales y la proyección de futuro de la compañía, objetivo compartido por ambas partes".
