Los canarios se jubilan por lo general antes que el resto de españoles y cobran pensiones inferiores a la media nacional. Un estudio del Instituto BBVA de Pensiones, elaborado por el economista José Herce, aborda las diferencias regionales en materia de afiliación, cotizaciones y cuantía de las pagas. Pone en evidencia el panorama en el Archipiélago, donde los isleños se retiran por lo común tras haber cotizado menos que los residentes en otras comunidades autónomas. Los salarios de los trabajadores en las Islas son sustancialmente más bajos que en el territorio peninsular y ello afecta al importe de las pensiones.
La caída de la actividad económica a partir de 2009 llevó a una importante reducción de las rentas del trabajo, la fuente en exclusiva de la recaudación para el pago de las pensiones, remarcó el profesor de Economía Aplicada de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, Manuel Romero, que subrayó la "quiebra" del sistema ante la caída de cotizantes y la disminución de salarios en España, por lo que abogó por su modificación para garantizar su viabilidad financiera.
En los últimos cuatro años el Gobierno central ya ha dispuesto de 34.000 millones de euros del Fondo de Reserva de Pensiones y reducido su saldo hasta dejarlo en sólo 41.634 millones a finales de 2014. La previsión del Estado es que hasta al menos 2020 los ingresos sigan siendo insuficientes para cubrir el pago de las pensiones, advirtió Romero, que cuestiona la respuesta del Gobierno de elevar desde enero de 2013 la edad de jubilación en dos años, hasta los 67, y aprobar la ley que se aplicó por primera vez en 2015 para definir la actualización de las cuantías de las pensiones. El sistema hace depender la revalorización de las pensiones del equilibrio entre ingresos y gastos, por lo que, si se mantiene esta norma al menos hasta 2020, las pensiones recibirán una subida del 0,25%, que supone una pérdida progresiva de poder adquisitivo, alertó este experto.
En ello coincidió el portavoz de la Federación de Pensionistas de Canarias de CCOO, Luis Padrón, que añadió que "una edad de jubilación regulada según la situación de cada persona sería lo ideal". Demandó mayor flexibilidad.
A juicio de Romero, la solución es múltiple y pasa por dotar con presupuestos del Estado el pago de las pensiones, teniendo en cuenta que es la única política finalista en España. Destacó, asimismo, que "el impuesto de cotización a la Seguridad Social grava un mercado muy sensible como es el laboral". Criticó que el sistema de pensiones "da lugar a situaciones contradictorias, ya que el subsidio es percibido independientemente del nivel de renta del pensionista, de modo que muchas personas a las que realmente no les haría falta una subvención del Estado para mantener su poder adquisitivo la perciben".
Con todo, según del estudio de Herce, tras una muestra de datos de 2013, se desprende que la edad media de jubilación fue entonces en España de 62,4 años. En cambio, los canarios se retiran antes, a los 61,8 años, al igual que los castellano-leoneses y algo más tarde que los murcianos (61,5). Ello tiene que ver con los primeros efectos del retraso paulatino de la edad de jubilación y está influido por el impacto de las jubilaciones anticipadas, habituales durante la crisis.
El prototipo del jubilado canario ha tenido una carrera de cotización de 29 años, muy inferior al promedio nacional (32,3 años) y sólo por detrás de los gallegos. Las carreras más largas corresponden a los ciudadanos de Navarra (36,9 años), País Vasco y La Rioja (34,9).
Los nuevos jubilados canarios fueron, en el período analizado, los terceros que presentaron cotizaciones medias más bajas durante los 15 años anteriores al retiro, los años que hasta 2012 se tenían en cuenta para calcular la base reguladora y con ello la pensión. Sin embargo, tras la reforma de las pensiones, se amplía a 25 años el tiempo para calcular la cuantía.
Las reducidas bases de cotización en el Archipiélago coinciden con salarios medios más bajos, circunstancia que guarda relación en parte con el tejido productivo, con mayor peso del sector turístico.
Cotizaciones más bajas (5.625 euros de media anual en Canarias, por detrás de Extremadura, 5.138 euros, y Galicia, con 5.502 euros) significan bases reguladoras menores y, por ende, pensiones más bajas. El informe apunta que la pensión media de los retirados canarios era en diciembre de 2014 de 814 euros, entre las más bajas del país. Los últimos datos de octubre del Ministerio de Seguridad Social elevan esta cuantía a 826,41 euros, un 1,6% más respecto al mismo mes del año pasado, pero sigue a la cola del ranking nacional.
