La Unión Europea exigió a España que devuelva un millón de euros de fondos comunitarios destinados al cultivo del plátano a través del programa Posei entre los años 2008 y 2012 tras advertir deficiencias en su gestión. Bruselas se dirigió ayer a 18 estados comunitarios para reclamarles fondos de la Política Agrícola Común (PAC) "gastados indebidamente", que suponen un impacto de 276 millones de euros.

Estos países son, además de España, Bulgaria, la República Checa, Dinamarca, Alemania, Francia, Irlanda, Italia, Letonia, Lituania, Holanda, Portugal, Eslovenia, Eslovaquia, Rumanía, Suecia, el Reino Unido y Grecia, donde la Comisión Europea (CE) ha decidido posponer la aplicación de su decisión hasta 2017.

En el marco del procedimiento de liquidación de cuentas, Bruselas considera que diferentes importes declarados por esos Estados miembros con cargo al Fondo Agrícola de Garantía (Feaga) o al Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader) deben quedar "excluidos de la financiación de la Unión".

En el caso de España, indica que la incidencia financiera asciende a unmillón de euros. La corrección se refiere al Programa Comunitario de Apoyo a las Producciones Agrarias de Canarias (Posei) y, más en concreto, a deficiencias en el Sistema de Información Geográfica de Identificación de Parcelas Agrícolas (Sigpac) que afectaron a las ayudas complementarias por superficie cultivada de plátanos.

Desde la Asociación de Organizaciones de Productores de Plátanos de Canarias (Asprocan) se insistía ayer en la inexistencia de mala gestión por parte de los productores o de la propia organización y limitaba el problema únicamente a un fallo en el Sigpac-un sistena común de tramitación-. No obstante, y hasta no recibir el informe del Ejecutivo europeo Asprocan -que aglutina a la gran mayoría de los plataneros de las Isla- no sabe determinar el alcance de la reclamación ni el proceso para recurrir la decisión de la CE.

En paralelo, el Ejecutivo comunitario informó de que devolverá a los agricultores europeos 410 millones de euros procedentes del fondo de reserva de la PAC, de los que España recibirá 53,3 millones.

Bruselas recuerda que cada año se deduce "una cantidad relevante" de los pagos directos a los agricultores para crear una reserva anual destinada a paliar posibles crisis. La Comisión señala que, a pesar de las dificultades que atravesaron algunos sectores el año pasado, "no fue necesario tocar la reserva de crisis en 2015".

El concepto de "reserva para crisis" y el mecanismo de reembolso se acordaron en 2013 durante la reforma de la PAC y se aplicaron por primera vez en el presupuesto de 2014. La deducción sólo afecta a los pagos directos a los agricultores por encima de los 2.000 euros y no se aplica en Bulgaria, Croacia y Rumanía, donde los pagos directos aún se están incorporando.