El sector turístico español está ya muy cerca de llegar a niveles de facturación y precios similares a los de antes de la crisis, tras una "clarísima" recuperación de la demanda nacional, la llegada de 68 millones de turistas en 2015 y los resultados de Canarias del cierre de año, según la Alianza para la Excelencia Turística Exceltur.

Entre los meses de enero y noviembre de este año han llegado a Canarias 10.646.244 pasajeros extranjeros, un 1,79% más que en el mismo período del año ante-rior, 187.228 pasajeros foráneos más. Datos que evidencian la pujanza de la industria turística en el Archipiélago.

El vicepresidente ejecutivo de Exceltur, José Luis Zoreda, sostuvo que la rentabilidad empresarial ha sido "aceptable" este año y empieza a acercarse a la que se obtiene en muchos otros países alternativos y, por tanto, "estamos en un escenario que favorece la reinversión". "Sentimos que 2016 pudiera llegar a ser otro año mejor que 2015", vaticinó.

De hecho, la asociación prevé revisar al alza su valoración inicial de un crecimiento del 3,6 % del PIB turístico en el conjunto de 2015, después de unos resultados "extraordinarios" en Canarias en los últimos meses del año, entre otros factores.

Zoreda recordó que el turismo ha sido, asimismo, el único sector que ha creado empleo neto en el conjunto del país durante los últimos dos años y, actualmente, con 2,2 millones de trabajadores se aproxima a la cifra anterior a la crisis. A pesar de que la estrategia de bajar precios para generar demanda "hipoteca tu capacidad de recuperación durante muchos años", Zoreda aseguró que "ya no estamos en caída libre, sino en un proceso de recuperación", y espera que 2016 pueda ser un año en el que se consoliden "esos niveles de precios deseables de antes de la crisis".

En 2015, se ha notado clarísimamente una recuperación del consumo español, que es clave sobre todo para destinos del interior que por sus condiciones paisajísticas o climáticas no se benefician del turismo de sol y playa.

Además, sigue habiendo factores externos que están favoreciendo al sector como la caída del precio del petróleo, la devaluación del euro frente a la libra y al dólar, que ha hecho que el crecimiento del turismo norteamericano y sudamericano en España haya tenido una tasa mayor que en otras partes del mundo. A ello se suma una reducción "sustancial" de las alternativas para viajar de los rusos por medidas políticas tomadas en contra de lo que era hasta ahora su principal destino, Turquía.

Aunque Rusia ha tenido problemas de carácter económico como la devaluación del rublo o pérdida de capacidad adquisitiva de una parte de la sociedad, "no es menos cierto que sigue habiendo una serie de rusos que pueden viajar", por lo que Zoreda espera que, en 2016, y "no por condiciones macroeconómicas sino por las geopolíticas", este mercado "vuelva otra vez a tener un impacto y una presencia importante en España".

En cuanto a Asia, España tiene importantes atributos e iconos como Barcelona, Madrid o el Camino de Santiago, que "sí pueden y deben de ser promocionados adecuadamente en el Extremo Oriente en países como China, Japón o Singapur", remarcó Zoreda.