Los españoles pagan por la gasolina y el gasóleo menos que la mayor parte de los europeos porque la carga tributaria sobre los carburantes es más baja que en otros países, pero el precio antes de impuestos es de los más altos de la UE. Esa situación, reflejada en informes de la Comisión Europea, abona la tesis de que el mercado español de los hidrocarburos tiene un déficit de competencia y de que las petroleras trabajan con márgenes comerciales por encima de la media europea.

Es la misma tesis que defiende la Cámara de Comercio de Gran Canaria con respecto a Canarias y por lo que en septiembre pasado envió un informe a la Comisión Nacional del Mercado y de la Competencia (CNMC) a fin de que investigara las razones por las que antes de impuestos los carburantes son en el Archipiélago más caros que en el resto de Europa.

La patronal del sector, sin embargo, cuestiona la fiabilidad de los datos que los estados envían a Bruselas.

El más reciente informe de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) sobre los carburantes muestra, a partir de esa información de la UE, el panorama de precios medios que se explica en los siguientes puntos:

Z Antes de impuestos.

España tiene el tercer precio sin impuestos más alto de la gasolina, por detrás de Malta y Dinamarca. El precio español es un 10% más elevado que el de Alemania y supera en un 14,6% el de Francia. En el caso del gasóleo, el precio antes de impuestos es el octavo mayor entre los 28 países de la UE y está un 18% por encima del que el informe atribuye a Francia.

Z Después de impuestos

La posición de España cambia de manera radical cuando se incluyen los impuestos (tributos especiales): El precio de venta al público de la gasolina queda por debajo de la media europea y el del gasóleo se convierte en el séptimo más bajo. Se explica porque la carga fiscal es mayor en otros países. En Francia y Alemania, los impuestos representan en torno al 65% del precio de venta al público. En España suponen el 57%.

Z El margen bruto

Los informes de la CNMC indican que la diferencia entre el precio antes de impuestos en España y en otros países está en el llamado margen bruto, que comprende los componentes ajenos a la cotización internacional de los carburantes (costes logísticos y márgenes comerciales de los operadores mayoristas y de las estaciones de servicio, principalmente). En el caso de la gasolina, ese margen bruto superaba en noviembre en 6,5 céntimos por litro el promedio de Francia y en 5 céntimos el de Alemania.

¿Qué explica esas diferencias de precios con Europa antes de impuestos? Según las organizaciones de consumidores, es un reflejo de la posición de dominio de las grandes petroleras en un mercado en el que falta competencia.