La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Los exportadores desinvierten en países avanzados y frenan proyectos

El hundimiento del petróleo, y sin visos de suelo predecible, hace al mundo más sombrío, y sus efectos, aunque beneficiosos en primera instancia para las economías importadoras, puede tener efectos negativos de segunda ronda.

ZFondos soberanos. Los fondos soberanos (instituciones inversoras propiedad de estados petroleros) mueven 2,3 billones de dólares. La crisis del petróleo tiende a frenar sus inversiones fuera de sus países e incluso a repatriar recursos para compensar los déficit fiscales. Su desinversión en las bolsas de economías avanzadas para generar liquidez ha contribuido al retroceso de los parqués en 2015 y al desastroso inicio de 2016. El banco J. P. Morgan cree que este año podrían vender acciones por 75.000 millones de dólares.

Z Desinflación. El petróleo muy barato, aliado con un paro muy alto y con una demanda insuficiente, está lastrando la inflación (en tasas ligeramente por encima del 0% e incluso negativas) y esto está obligando a los bancos centrales a mantener sus tipos de interés casi en el 0%.

La divergencia entre el índice general de inflación, que sigue muy deprimido, y la inflación subyacente (que no recoge los combustibles y los productos frescos, y que tiende levemente al alza) complicará aún más la gestión de la política monetaria en la medida en que, si ésta sigue los dictados del crudo, podría acabar inflando el resto de los precios. La prolongación de la insólita ofensiva monetaria genera temor porque, en caso de recaída económica, los bancos centrales carecerían de suficiente capacidad de respuesta una vez que ya han puesto sus tipos en el límite inferior cero, han situado en negativo sus tasas para la banca y han agigantado sus balances comprando deuda y riesgos públicos y privados. Muchos analistas temen a su vez que la deflación de las materias primas pueda contagiarse al resto de la economía, dando lugar a una espiral deflacionaria.

Z Riesgos de burbujas. La relajación monetaria está conduciendo a la asunción de riesgos crecientes. Al hundimiento de la rentabilidad de la renta fija por la caída de tipos se suma ahora la deriva bajista de las bolsas por miedo a China, al petróleo muy barato y a los síntomas de una desaceleración global.

Aunque parte del dinero salido del parqué se ha refugiado en la renta fija, el escenario conduce a que mientras petróleo, desinflación y tipos bajos mejoran la disponibilidad de renta, la riqueza financiera empeora. Y esto es un acicate para comportamientos de riesgo creciente en búsqueda de rentabilidad. El temor a "burbujas" de activos financieros y a su estallido también golpea las expectativas y suma perfiles sombríos.

Z Quiebras y rescates. Tres fondos de alto riesgo que invertían en proyectos petroleros quebraron en diciembre. La escena es similar a las que precipitaron la crisis en 2007-2008. Se temen más impagos en empresas y fondos ligados al crudo, y que esto contagie a la banca. También han vuelto los rescates a países: Azerbaiyán lo negocia con el FMI y el Banco Mundial. Otros países petroleros podrían estar abocados a ellos.

Compartir el artículo

stats