Las producciones cinematográficas dejaron en Canarias casi tres millones de euros mensuales el año pasado con el rodaje de 12 películas, cinco series y un documental. Los datos demuestran la salud ascendente de la industria del cine en el Archipiélago, no sólo por los diferentes paisajes y el buen clima en las Islas, sino especialmente por los singulares incentivos fiscales del Régimen Económico y Fiscal (REF), superiores en 20 puntos a los del resto del territorio y más ventajosos que en otros países, que han aumentado de forma espectacular las producciones internacionales y nacionales en Canarias. Solo en lo que va de año ya se están rodando o están previstos El Titán, de Lennart Ruff, 1, 2, 3?Go!, de Barbara Rothenborg, En zona hostil, que dirige el ilustrador Adolfo Martínez Pérez y protagoniza Jesús Castro -que vuelve a las Islas tras rodar una parte de El Niño en Gran Canaria- o El faro de las orcas, bajo la dirección de Gerardo Olivares y con la actriz Maribel Verdú en su papel principal.
Para promocionar de forma unificada a Canarias, el Gobierno regional ha creado Canary Island Film, una marca única que, por primera vez, integra a los cabildos insulares y a las empresas privadas del sector. Esta marca promocional se presentará la próxima semana en el festival internacional de cine alemán Berlinale. El objetivo es potenciar el sector del cine en Canarias, con un alto valor añadido, empleabilidad y sin impacto medioambiental, convirtiendo al Archipiélago en un territorio de referencia mundial en las producciones audiovisuales, a través de sus atractivos incentivos fiscales, un experimentado sector local, clima favorable todo el año, variedad de localizaciones a escasa distancia, buenas conexiones aéreas y marítimas y amplia oferta hotelera.
Aumento de las filmaciones
De hecho, el presidente del Ejecutivo, Fernando Clavijo, que presentó ayer la marca única, señaló que "el negocio es redondo y evidente", puesto que no sólo supone ingresos, sino que además se fortalecen las productoras locales que participan en esos rodajes, se produce empleo, se recaudan impuestos y se promocionan las Islas en el exterior con las películas para captar a potenciales turistas. Indicó que, sólo en 2015, las producciones audiovisuales supusieron un gasto en el Archipiélago de 33 millones de euros -2,75 millones mensuales-.
El aumento de rodajes en cuatro años ha sido llamativo, ya que en 2012 hubo cinco rodajes, de ellos una superproducción, dos largometrajes extranjeros y otros dos nacionales, y en 2015 se llegó a 18 rodajes, de los cuales uno fue una superproducción, once largometrajes, cinco series y un documental. Con Canary Island Film los productores dispondrán de un contacto único en las Islas, que a su vez les remitirá a los agentes públicos o privados adecuados en función de sus necesidades, según expusieron en la presentación Fernando Clavijo, la consejera de Turismo, María Teresa Lorenzo, y la coordinadora del departamento audiovisual de Canarias Cultura en Red, Natacha Mora. En la conformación de esta marca unificada han trabajado el Gobierno, la Zona Especial Canaria, los siete cabildos a través de sus Film Commission y las empresas privadas representadas en el Clúster Audiovisual Canario.
Lejos de generar recelos entre las Film Commission insulares que ya operan en el sector, el presidente señaló que con este marca se mejora la "coordinación" y la información que se facilita a los productores, con quienes habrá "contacto directo" para informar sobre paisajes o ventajas fiscales.
Esta es una de las medidas del Gobierno para articular la Estrategia Canaria de las Industrias Culturales y Creativas Audiovisuales que elabora en la actualidad, un trabajo que trata de marcar, por una parte, las pautas para la atracción de rodajes en el territorio, y por otra, el apoyo a la mejora de esta industria en Canarias.
Para todo ello, se ha editado una guía que explica qué tipo de producciones pueden beneficiarse de las ventajas fiscales y los tipos de gastos a deducir. Canarias cuenta con incentivos fiscales diferentes para la producción audiovisual, como la ZEC, la RIC y la Deducción por Inversiones. Esta última ofrece una deducción de veinte puntos superior a la que se aplica en el resto del territorio nacional en el Impuesto de Sociedades. Esta exención fiscal alcanza entre un 35 y un 40% dependiendo si la producción es de carácter extranjera o española, respectivamente.
Este es uno de los incentivos más potentes del REF porque, a través de la constitución de las Agrupaciones de Interés Económico (AIE), los productores dan entrada a capital inversor canario ajeno al cine, que reciben como rentabilidad por financiar parte de las producciones créditos tributarios que se pueden deducir en la declaración de sus impuestos.
