La economía española creció el 3,2% en 2015 y el 0,8% en el cuarto trimestre respecto al anterior, con una contribución similar de la demanda nacional y una aportación menos negativa de la demanda exterior, según informó ayer el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Además, la tasa de crecimiento del PIB en el cuarto trimestre fue del 3,5 %, una décima superior a la del trimestre anterior. Dentro de la demanda nacional (que tuvo una contribución de 4,1 puntos), destacó el crecimiento anual del 3,5 % en el gasto en consumo final de los hogares y el incremento del 6,4% de la formación bruta de capital fijo.

La demanda exterior neta de la economía española registró una contribución negativa de 0,6 puntos (-0,7 en el trimestre precedente) al crecimiento anual del PIB trimestral, como consecuencia de un mayor incremento respecto al trimestre anterior de la tasa de crecimiento de las exportaciones (del 4,5% al 5,3%) frente a la de las importaciones (del 7,2% al 7,7%).

En términos anuales, el empleo aumentó el 3%, una décima menos que la del tercer trimestre, lo que supone un incremento de aproximadamente 495.000 puestos de trabajo.