Red Eléctrica de España (REE) y Endesa se enfrentan a una sanción de 12 millones de euros por los apagones ocurridos en diciembre de 2012 en Gran Canaria y en septiembre de 2013 en La Palma y que afectaron a decenas de miles de clientes. El Consejo de Gobierno aprobó ayer resolver los dos procesos sancionadores por infracciones calificadas de "muy graves" al amparo de la ley del sector eléctrico.

La multa que se refiere al regulador de sistema eléctrico (REE), de seis millones de euros, tiene como origen las incidencias ocurridas los días 3 y 5 de diciembre de 2012 y que afectaron, en el primer caso, al 19% de los clientes de la isla -algo más de 85.000 vecinos de los municipios de Telde, Santa Brígida y San Mateo-, y al 85% dos días después, cerca de 250.000 usuarios. Entonces casi la mitad del territorio de Gran Canaria se quedó sin electricidad. La situación, que se inició a las 09.00 horas de la mañana, se repuso pasados pocos minutos en algunas zonas de la capital, pero tuvo sin luz dos horas al resto de la isla.

En ambos días la incidencia se produjo por averías de equipos y una desconexión en la subestación del barranco de Tirajana.

Con el mismo criterio, el Gobierno, a propuesta de la Consejería de Economía e Industria, que dirige Pedro Ortega, impone una sanción por igual cuantía a Endesa como consecuencia de la interrupción no programada del suministro eléctrico que dejó sin luz a todos sus clientes de la isla de La Palma durante varias horas el 3 de septiembre de 2013.

Tras el cierre del expediente administrativo con la decisión de ayer ambas empresas pueden ahora recurrir ante la jurisdicción contenciosa-administrativa.

Con todo, los 6 millones para cada empresa es la cuantía más baja que prevé la ley para las incidencias calificadas de "muy graves", que alcanza hasta los 60 millones.