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"Tanto atún rojo y sin poder pescar"

Un sorteo selecciona los 30 buques que capturarán las 6,6 toneladas que restan para liquidar la cuota

Enrique Hernández Bento, ayer, extrayendo las papeletas. ANDRÉS CRUZ

Solo faltaban los bombos de la lotería de Navidad. El sorteo que se celebró ayer en la sede de la Delegación del Gobierno de Canarias para conocer qué 30 buques podrán pescar los 6.629 kilos de atún rojo que restan de la cuota fijada para el Archipiélago -140 toneladas, un 1,21% del total nacional-, se vivió con intensidad y expectación por parte de la flota artesanal de las Islas, pero también con mucha resignación y crispación.

La zafra comenzó el 9 de marzo, pero el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente dictó el día 18 su suspensión cautelar para fiscalizar la cantidad capturada hasta ese momento. La Subdirección General de Control de esta institución determinó el martes pasado que 30 barcos tendrían que apresar tan solo 30 piezas, una de 220 kilos por cada embarcación, para saldar el cupo asignado a Canarias. Lo que no definió el órgano ministerial es la forma en la que deberían ser elegidos los buques, por lo que la Delegación propuso que fuera mediante sorteo para evitar un "trago amargo" a las cofradías.

Los más afortunados fueron los pescadores de Tenerife, puesto que 14 buques de esta isla -11 ligados a Islatuna y tres a Pescados Ramón e Hijos- fueron agraciadas. A estas embarcaciones se suman otras 11 de Fuerteventura -seis de la Cofradía de Pescadores de Gran Tarajal y cinco de la de Morro Jable-, tres en Gran Canaria -dos de la Cofradía de Pescadores de Playa de Mogán y una de la de Arguineguín-, una de la Organización de Productores de Túnidos y Pesca Fresca (Optuna) de Lanzarote y otra de la Cofradía de Pescadores de Nuestra Señora de los Reyes en El Hierro.

La urna que presidía la sala de juntas de la Delegación contenía 143 papeletas con el código numérico de cada buque autorizado para la zafra. El secretario de la Cofradía de Pescadores de Arguineguín, Francisco Jiménez, asistió resignado al sorteo. Asegura que el azar ha sido la última solución que quedaba para poder cerrar la campaña, tras los pasos preliminares dictados desde Madrid.

La cuota fijada para Canarias es, bajo su punto de vista, "desastrosa". El hecho de que sea muy exigua conduce a que los pescadores pierdan una importante fuente de ingresos porque cada kilo de esta especie se paga a ocho o nueve euros.

"El mar está lleno de atunes rojos y no se puede salir a pescar", lamenta. Por eso Jiménez demanda que se modifique la orden de reparto y se exija al Gobierno central el 10% de la cuota nacional. A su juicio, el Estado no tiene en cuenta el artículo 17 de la política pesquera común de la UE -aprobada en diciembre de 2013 y en vigor desde enero de 2014- que recoge la protección de las prácticas artesanales y sostenibles con impacto social y económico, una definición, sostiene, en la que se engloba la flota canaria.

La representante de la Cofradía de Pescadores de Nuestra Señora de los Reyes y también secretaria de la Asociación Plataforma por el Sector Pesquero de Gran Canaria, María Dolores Guedes, también solicita un incremento de la cantidad fijada para Canarias.

Guedes defiende que aunque la captura de esta especie no haga rico a los pescadores, "ayuda a cubrir los gastos que generan las embarcaciones". A su juicio, la flota canaria ha demostrado, una vez más, "unidad" para salir del "embolado" en el que les dejó Madrid al no indicarles la manera en la que deberían elegir la treintena de barcos que deben liquidar la cuota.

La representante de la cofradía herreña aseguró ayer que el proceso de elección a través de sor-teo es "democrático", porque se evitan los enfrentamientos entre las diferentes cofradías, una si-tuación que pretendía el Estado con sus actuaciones, según apunta Guedes.

"Te tocó la lotería de Navidad"

Jiménez fue el encargado de comunicarle a Hipólito Miranda, más conocido como Monsi, que el buque del que es patrón y armador, Rosa de los vientos, había sido agraciado.

"Monsi, te tocó la lotería de Navidad. ¡Has sido el único de la Cofradía de Arguineguín!", le comentó por teléfono minutos después de que finalizara el sorteo. La suerte que se repartía era poca, pero muy significativa para aquellos a los que la diosa fortuna les agasajó con un regalo en forma de atún rojo.

Al otro lado de la línea, Monsi recibió la noticia con sorpresa y alegría, pero también con amargura. "Me siento bien pero mal. Con el cupo que tenemos no vamos a poder hacer mucho", asegura.

Miranda lleva tres años participando en la campaña con esta embarcación y "otros muchos" dedicados a este sector. Hasta el momento no había podido capturar ninguna pieza de atún rojo con Rosa de los vientos por la "ridícula cuota" que tiene Canarias. Otros se le adelantaban y él se quedaba con las manos vacías. Ahora la suerte le ha mirado a él y, aunque sea solo una captura, reconoce que" algo es algo". "Pero, ¿dónde tienen los ojos los políticos?", se pregunta.

Listado

Hernández Bento entiende la postura de la flota canaria y cree que "hay justificación" para plantear una negociación que desemboque en el aumento de la cuota para el Archipiélago. Precisamente fue él quien se encargó de sacar ayer las papeletas de la urna. Tras explicar brevemente cómo sería el procedimiento, comenzó a cantar números a partir de las nueve y cuarto de la mañana. En alguna ocasión, incluso, imitó la entonación empleada por los niños del colegio de San Ildefonso cada 22 de diciembre durante el sorteo navideño, con lo que despertó las sonrisas de los presentes.

El secretario general de la Delegación del Gobierno en Canarias, Vicente Redondo, y el director de Agricultura y Pesca del mismo organismo, Luís Ortín, anotaron los busques agraciados en un acta. Aunque el plazo para trasladar el listado con las referencias al Ministerio expiraba hoy a las once de la mañana, el documento se envió desde ayer a la institución para que determine "cuanto antes" la fecha de reanudación de la zafra.

De antemano se sabía que la suerte estaba echada y que solo 30 buques serían los elegidos. Pero sus papeletas no fueron las únicas en salir. Otras treinta se extrajeron para elaborar una relación de reserva. Ortín explicó que en caso de que algunos de los primeros declinen salir a faenar porque consideren que no les compensa al estar lejos de la zona de pesca, saldrán de este segundo listado quienes les sustituyan. Así la esperanza, en algunos pescadores canarios, aún late con fuerza.

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