Viene a respaldar al que fue su oponente en Madrid hace unas semanas. ¿Qué opinión tiene sobre su reelección?
Gustavo Santana nunca ha sido mi oponente, somos amigos desde hace años. La organización en Canarias está hoy bien gracias al trabajo que ha hecho junto a su equipo y, con respecto a ese congreso federal de marzo al que se refiere, también en el ámbito nacional UGT está mejor y en buena parte se debe a las propuestas que llevó Gustavo a la cita congresual.
¿Qué es lo primero que está abordando desde su cargo?
Lo primero es cerrar este proceso de congresos y luego empezar a poner las bases para que no hablen tanto de nosotros internamente y podamos, en cambio, hablar más de los problemas de los trabajadores.
¿Cambia los planes no tener un nuevo gobierno en España?
Debe haberlo cuanto antes para poder afrontar los problemas fundamentales que tiene la sociedad y, de forma especial, los trabajadores. En el congreso ya planteamos varios, como la necesidad de encontrar solución para las personas de más de 55 años que no van a encontrar empleo; hay que generarles un puente hacia la jubilación. Queremos hablar de turismo y de la necesidad de subir los estándares de calidad, también mediante el incremento de los salarios.
¿A qué le suenan los papeles de Panamá?
Vamos a trabajar con la Confederación Europea de Sindicatos en contra de esta golfería que son los paraísos fiscales.
¿Toca cambiar la estrategia en un escenario postcrisis?
No creo que pueda darse por terminada la crisis, sería obviar que hay una inmensa mayoría de ciudadanos que siguen en los más profundo de ella. Tenemos que derogar las reformas laborales, que no eran necesarias para salir de la crisis y que se hicieron para unos pocos. Los empresarios no pueden continuar despidiendo a su antojo.
Gustavo Santana defiende en Madrid rebajar del 25% al 10% los avales necesarios para ser candidato, pero aquí se ha mantenido el 25%. ¿Cómo ve eso?
Así ocurre en todo el país. Las reformas estatutarias se aplican en el siguiente congreso y será entonces, al entrar en vigor los estatutos, cuando se baje al 15%, que es finalmente el porcentaje que quedó establecido. De todos modos, Gustavo Santana ha aportado mucho más que eso al proceso congresual. Ha sido muy importante para que el Congreso de la UGT reflejara y aprobara propuestas como la creación de una comisión que discuta esas cuestiones, pero también sobre cómo vamos a elegir a los propios delegados que van al congreso. Hay que abrir más el sindicato a la participación de las bases y tenemos que decidir si discutimos de todo en el congreso o hacemos conferencias anuales que nos permitan ir fijando posición sobre cada tema.
