El PIB de Canarias crecerá un 2,9 % en 2016 y un 2,8 % en 2017, y generará cerca de 70.000 puestos de trabajo en estos dos años, lo que situará la tasa de paro de las islas en el 24,8 % y permitirá recuperar el empleo perdido en la etapa de crisis, según un estudio del BBVA.

El economista jefe para España de BBVA Research, Miguel Cardoso, y el director territorial para Canarias de la entidad, Javier Llinares, han presentado hoy en rueda de prensa este estudio sobre el archipiélago, que augura que su economía crecerá un 0,5 % más que en los tres últimos ejercicios, con lo que lograría cuatro años consecutivos de incremento económico.

Desde el BBVA se observan el elevado paro juvenil, la necesidad de internacionalización de la economía canaria y su digitalización como retos que se deben afrontar en las islas, al igual que la excesiva temporalidad en las contrataciones y la mejora de la calidad del capital humano.

Su previsión de crecimiento para las islas, que además se sitúa por encima de la media nacional, está asentada en la actividad turística, como fuente importante de recursos favorecida por un entorno positivo global, y en el sector servicios, impulsado por el aumento de la demanda interna.

Según Cardoso, hasta que se consolide la creación de empleo no se darán las condiciones para que incrementen los salarios, pues la elevada tasa de paso actual permite una sobreoferta que genera retribuciones bajas.

Así mismo, ha señalado que el ajuste fiscal no será un lastre para la economía canaria como sí ocurrirá en otras comunidades autónomas, al haber cumplido las islas con el objetivo de déficit, lo que las situará en una posición de ventaja.

Cardoso ha advertido de que existen riesgos que pueden hacer peligrar este aumento de la actividad económica, como es el de la incertidumbre política generada tras las últimas elecciones generales.

Si esta incertidumbre se reduce de forma rápida tendrá un efecto moderado, pero, de prolongarse durante 6 meses o 1 año, puede tener un impacto más fuerte en el crecimiento del PIB de 2017, con un punto de sustracción, tanto en España como en Canarias.

Según Llinares, la economía española muestra un dinamismo inesperado y Canarias es un buen reflejo de ello.