La economía española creció entre enero y marzo de este año el 0,8% respecto al trimestre precedente, según la estimación preliminar del producto interior bruto (PIB) publicada ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Ese resultado iguala los registrados desde el verano de 2015 y viene a certificar que, en términos de contabilidad oficial, la economía española ha mantenido su velocidad de crucero en medio del colapso político por el desacuerdo entre los partidos para la formación de Gobierno y en un contexto de ralentización de la economía mundial. Según las predicciones de algunos observatorios económicos, Canarias ha mantenido asimismo un ritmo de crecimiento análogo al de finales del pasado año, que cerró con un incremento del 2,8% sobre 2014.

La situación política, que obligará a los ciudadanos a volver a las urnas el día 26 de junio, ha sido citada de manera recurrente como una amenaza para la recuperación económica desde ámbitos financieros, empresariales y otros. De momento, no hay rastro en el PIB de los riesgos que se han verbalizado (frenazo de la inversión y del consumo, fuga de capitales...). La primera estimación del valor añadido generado por la economía española entre enero y marzo sitúa el crecimiento intertrimestral del PIB en el 0,8%, una décima por encima de lo previsto por el Banco de España. El último informe de esta institución aludía a una "moderada ralentización" de la economía en el trimestre, si bien al mismo tiempo subrayaba que el consumo privado tuvo un tono expansivo, al igual que la renta de los hogares y la creación de empleo. En tasa interanual, el PIB nacional creció a razón del 3,4%, una décima menos que en el último trimestre de 2015 e idéntico resultado que durante el verano de ese año.

Con el repunte trimestral del PIB se encadenan ya once trimestres de avances, mientras que la tasa interanual acumula nueve trimestres en positivo, con crecimientos superiores al 3% en los últimos cuatro trimestres.

España continúa registrando avances superiores a los medios de la zona euro. La oficina estadística de la UE (Eurostat) informó ayer de que la economía de los 19 países de la moneda única creció de manera agregada y de un trimestre para otro el 0,6%, tasa que duplica la de fines de 2015 y que sitúa el PIB del período enero-marzo en 2,480 billones de euros, por encima el nivel que tenía en 2008, a las puertas de la Gran Recesión.

Sobre el crecimiento de este año, que el Gobierno fija en el 2,7%, el Gobierno está seguro que tras el crecimiento del 3,4% en tasa interanual durante el primer trimestre, se cumplirá sin problemas, ya que sólo correría peligro si se produce una "debacle", algo altamente improbable.

Por su parte, las predicciones conocidas hasta ahora sobre el comportamiento de la economía canaria tampoco reflejan baches en el PIB.

Aunque el pasado año las previsiones no se cumplieron y el crecimiento de la actividad económica del Archipiélago fue inferior a la media del Estado, expertos como los del cartel de analistas del BBVA mantienen la marca alcanzará el 3%. Funcas, menos optimista, duda que se alcance ese porcentaje y apunta un crecimiento similar al del pasado año y la CEOE teme que con la incertidumbre se el PIB descelere y se frene en el 2,6%.