Repsol obtuvo un beneficio neto de 434 millones de euros en el primer trimestre de este año, un 43% menos que en el mismo periodo de 2015, en el que se incluían resultados financieros excepcionales de 500 millones de euros, debidos básicamente a la posición en dólares que tenía la compañía tras cobrar la expropiación de YPF, y cuyo importe se destinó el pasado mes de mayo a la adquisición de la petrolera canadiendeTalisman.