El apellido del magnate Donald Trump, virtual candidato republicano a la Presidencia de Estados Unidos, aparece ligado a 32 sociedades opacas inscritas en paraísos fiscales en la base de datos de los papeles de Panamá, publicada esta semana por el ICI.

En el buscador de los papeles de Panamá, informó Efe, las empresas aparecen vinculadas a cinco direcciones postales, dos en Panamá, otras dos en Seúl y una más en Estados Unidos. La dirección de EEUU -número 725 de la Quinta avenida de Nueva York- corresponde con la Trump Tower, uno de los rascacielos más altos de Manhattan y propiedad del magnate.

Por su parte, la actriz británica Emma Watson, conocida por su papel de Hermione en la saga de Harry Potter, abrió una compañía offshore en las Islas Vírgenes, según publicaron ayer los medios del Reino Unido. De 26 años, Watson registró en 2013 la compañía Falling Leaves Limited para, según el Daily Mail, comprar una casa en Londres por 3,5 millones de euros, aunque un portavoz de la estrella británica aseguró que ella no creó la sociedad para evadir impuestos, sino "con el único propósito de proteger su anonimato y seguridad".

Antes que Watson, la filtración ya afectó en el Reino Unido al primer ministro británico, David Cameron, al admitir que ostentó acciones por más de 37.500 euros en un fondo de inversión de Bahamas creado por su padre. Tras la polémica, el premier británico convocó para mañana en el palacete de Lancaster House de Londres la primera conferencia internacional para buscar, a lo largo de una jornada, un compromiso contra la corrupción con medidas globales y concretas global.

Sobre otro mandatario afectado por el escándalo, el argentino Mauricio Macri, libró ayer un juez del país nuevos exhortos a Uruguay, Reino Unido, Irlanda, Panamá y Brasil para aclarar su papel en sociedades familiares offshore.

"Contundentes"

Mientras, el despacho de abogados Mossack Fonseca, epicentro del escándalo, anunció ayer que emprenderá acciones legales "contundentes" contra el ICIJ por la publicación íntegra de su base de datos. "Como empresa responsable y respetuosa de la libertad de prensa, hemos buscado comunicación para evitar las acciones legales. Sin embargo, al ignorar nuestra carta de 'cease and desist', el Consorcio nos obliga a iniciar acciones legales contundentes", advirtió.