Simón Rodríguez y Antonio Hernández, de 31 y 37 años respectivamente, siempre sintieron atracción por el sector primario. Sus familias han tenido fincas y, de algún modo, siempre han sabido lo que es trabajar con la tierra. Ese es uno de los motivos que explica que estos dos canarios se hayan embarcado en la aventura de emprender a través del cultivo de pitahaya.
Su idea de negocio, premiada con una beca de 10.000 euros en el II Foro de Emprendedores, proyecta la plantación de pitahaya en las condiciones naturales en la que la planta crece de forma silvestre. "Conocimos el producto y nos dijimos que había que hacerlo", confiesa Rodríguez.
Esta propuesta, que apuesta por la agricultura ecológica basada en el desarrollo sostenible, no cuenta todavía con ningún terreno determinado porque los impulsores del proyecto están barajando aún varias posibilidades.
Hernández resalta que esta especie está considerada un "superalimento" por sus grandes cantidades de antioxidantes, vitamina C, fibra y minerales, entre otras propiedades.
El objetivo de estos dos jóvenes es exportar la producción a Europa, puesto que los no quieren establecer fronteras al crecimiento de su negocio y se trata de un buen nicho de mercado con escasa competencia en estos momentos.
En octubre del pasado año comenzaron a perfilar este proyecto y desde entonces no han parado. Afirman que su idea de negocio ya está en fase avanzada, por lo que ganas e ilusión no les falta para que triunfe. Pese al esfuerzo que implica emprender, la recompensa por ver funcionar algo que, a juicio de Rodríguez, es rentable,y vale la pena.
La ayuda económica de 10.000 euros que recibieron ayer les servirá, tal y como confesaron al término del evento, para adelantar al menos un año la entrada en producción.
