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El cese temporal de la minera Kinross en Mauritania no afecta a su sede isleña

La compañía canadiense atribuye la suspensión al veto del Ministerio de Trabajo a su personal extranjero - "Otras empresas experimentan problemas similares"

El cese temporal de la minera Kinross en Mauritania no afecta a su sede isleña

La minera Kinross Gold Corporation suspendió temporalmente su actividad en el yacimiento de Tasiast tras la prohibición de trabajar a su personal extranjero decidida por el Gobierno de Mauritania. Sin embargo, el cese anunciado el pasado lunes "no afecta al funcionamiento de las oficinas del grupo situadas en Las Palmas de Gran Canaria", informó ayer la compañía con sede en Canadá y quinta en el negocio mundial del oro.

Desde Kinross Gold detallaron que el pasado viernes el Ministerio de Trabajo de la república islámica consideró "inválidos" los permisos de sus empleados foráneos, fundamentalmente americanos y europeos con residencia en Canarias. "Kinross no puede continuar operando en la mina de Tasiast en estas circunstancias responsablemente desde el punto de vista medioambiental y de seguridad", añadieron en una nota de prensa.

Con minas y proyectos en Estados Unidos, Brasil, Rusia, Chile y Ghana, además de la explotación de Tasiast, la compañía norteamericana adoptó "todas las medidas necesarias" para cumplir la legislación mauritana y garantizar la validez de los permisos. Sin embargo, desde Kinross apuntaron que "otras organizaciones y empresas en Mauritania están experimentando actualmente problemas similares con el Ministerio de Trabajo respecto a permisos de trabajo".

Ante las "conversaciones en curso" con el Ejecutivo mauritano para resolver el problema laboral, la firma aurífera confió en mantener la fase uno de la expansión de la mina situada a 300 kilometros al norte de la capital del país, Nouakchott. Con un 88% de personal mauritano en el yacimiento, las mismas fuentes empresariales reiteraron su compromiso de "aumentar el número de trabajadores locales con las habilidades y experiencia necesarias para trabajar en la mina de Tasiast, lo cual es consistente con la práctica de Kinross en todas sus operaciones en el mundo".

La suspensión temporal de actividades en el yacimiento mauritano se produjodespués de que la minera candiense anunciara el pasado 13 de junio el final de la huelga mantenida por los trabajadores nacionales en Tasiast desde el 24 de mayo gracias al pacto alcanzado sobre un nuevo convenio colectivo. Desde la empresa negaron cualquier repercusión del paro laboral sobre los resultados y la expansión del mina de Tasiast, con todo el anuncio del cese eventual provocó anteayer una caída del 2,2% en el valor de las acciones de Kinross Gold Corporation en la Bolsa de Toronto.

Los conflictos laborales de Kinross tanto con los trabajadores como con las autoridades de Mauritania acontecieron tras el anuncio a finales de marzo de la primera fase en la ampliación de Tasiast, con una producción de 220.000 onzas de oro en 2015 (6,2 toneladas). Mediante una inversión de 300 millones de dólares, la compañía norteamericana pretende aumentar la capacidad de tratamiento de la planta de 8.000 a 12.000 toneladas diarias durante el primer trimestre de 2018.

Instalada desde 2011 en Las Palmas de Gran Canaria al amparo de las exenciones fiscales de la Zona Especial Canaria (ZEC), Kinross Gold Corporation invirtió 1,4 millones de euros para construir una base logística gracias a la concesión de 10.100 metros cuadrados durante quince años en el puerto de La Luz. Tras diversas autorizaciones temporales, la adjudicación en las inmediaciones del dique de La Esfinge, o muelle Nelson Mandela, se aprobó en abril del pasado año por parte de la Autoridad Portuaria de Las Palmas.

Además, la capital grancanaria constituye la residencia de las familias de más de 80 empleados de la compañía canadiense con trabajo en África Occidental, según informaron entonces fuentes de Kinross.

La compañía es también la avanzadilla de empresas con similares intereses en África y que pretenden acogerse a las facilidades fiscales y la seguridad de las que goza Canarias para dar el sato al continente.

A finales de 2015 transcendió una investigación del Departamento de Justicia de Estados Unidos y de la agencia reguladora de los mercados de valores (SEC, siglas en inglés) por presuntas irregularidades de Kinross en los pagos del yacimiento mauritano de Tasiast.

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