Los trabajadores canarios hicieron el año pasado casi cinco millones de horas extras retribuidas, según un reciente análisis de Randstad, empresa dedicada a los recursos humanos. Cerca de 300 millones de minutos que, sin embargo, no representan ni la mitad del tiempo que los empleados de las Islas destinaron al trabajo al margen de la jornada estipulada en sus contratos. El resto de las horas extraordinarias no se cobró, prácticamente 6,3 millones en el caso de los asalariados del Archipiélago, según se desprende de un informe en el que Comisiones Obreras (CCOO) expone lo que considera una nueva forma de "explotación laboral".

Los trabajadores españoles hicieron en 2015 un total de 126,6 millones de horas extras con arreglo a los cálculos de Randstad, que se apoyan en los datos de la Encuesta de costes laborales del Instituto Nacional de Estadística. De esa cantidad, corresponden a los empleados de la región algo más de 4,9 millones. Son en los dos casos horas extraordinarias que los asalariados efectivamente cobraron, pero no suponen todo el tiempo que estos permanecieron en sus puestos de trabajo más allá de la jornada contractual. De hecho, esos casi 127 millones de horas extras retribuidas apenas representan un 44% de todas las que los empleados del país pasaron de más en el taller, en la oficina, en la fábrica, en la obra, etcétera. Así lo pone de manifiesto el gabinete económico de CCOO en un informe al respecto, un informe en el que expone que las horas extraordinarias no recompensadas ni con más dinero ni con más tiempo libre suponen ya un 56% del total, es decir, más de la mitad. Ello implica que los trabajadores canarios en realidad hicieron en 2015 cerca de 11,2 millones de horas extras, de las cuales casi 6,3 millones no tuvieron recompensa alguna.

El sindicato también revela en su análisis que el peso de esa parte no retribuida de la jornada laboral se ha incrementado en los últimos años a consecuencia de la crisis. En 2008, cuando aún había quienes negaban el cambio de ciclo económico, las horas no pagadas eran menos de un 40% del total de las horas extraordinarias, un porcentaje que desde entonces ha aumentado progresivamente hasta llegar a un 57% en 2013, un 55% en 2014 y un 56% el año pasado. "Las horas extras trabajadas pero no pagadas conforman un claro componente de la explotación laboral", subraya CCOO en su informe.

El secretario general del sindicato en el Archipiélago, Carmelo Jorge, recuerda que el largo período de estrecheces ha traído consigo un notable incremento del número de contratos a tiempo parcial. Tan es así, que solamente en las Islas se suscriben cada día alrededor de 75 contratos cuya vigencia no va más allá de una semana.

El principal representante de CCOO en Canarias explica que, en muchos casos, estos convenios de apenas horas no se cumplen estrictamente. "Muchos trabajadores que están contratados por dos o cuatro horas al día acaban haciendo una jornada completa, solo que cobran las horas de más en negro o simplemente no las cobran", subraya Jorge, que apunta la pérdida de importancia de los convenios colectivos como uno de los factores que están detrás de esta situación.

El secretario general de Comisiones Obreras en la región pone énfasis en que, entre otras cosas, los convenios colectivos contribuyen a evitar que las empresas compitan vía costes laborales, de modo que esa pérdida de importancia de los grandes acuerdos entre patronal y sindicatos inherente a la crisis ha redundado en beneficio de "los que menos escrúpulos tienen". Hay que recordar cómo a finales de 2007 eran aproximadamente un millón (en toda España) los trabajadores que disfrutaban de convenios colectivos en los que sus empresas se comprometían a crear empleo neto durante el período de vigencia del acuerdo. En 2012, el quinto ejercicio que discurrió sumido de lleno en las estrecheces, ya solo eran unos 300.000 los asalariados que tenían un pacto con esa condición. "Si yo estoy en el paro y con hijos, consigo un contrato de cuatro horas y me dicen que me pagan las otras cuatro por debajo de la mesa, también digo que sí, porque me obligan. Una familia tiene que comer todos los días", ejemplifica Carmelo Jorge.

El análisis del gabinete económico de CCOO descubre además que las horas extras no retribuidas son más en los servicios, precisamente el sector del que depende la mayor parte de la economía de la comunidad autónoma. En la industria suponen un 41% del total de horas extraordinarias (representaban un 27% en 2008), mientras que en los servicios llegan a un 60% (47% en 2008).