La incipiente recuperación económica en las Islas ha venido acompañada del crecimiento del absentismo laboral. El temor a perder el puesto de trabajo desciende en contextos de progresión económica, circunstancia que para el delegado territorial de la Asociación de Mutuas de Accidentes de Trabajo en Canarias, Carlos Franchy, se refleja en el número de bajas.

No en vano, datos de este órgano exponen que si en 2013 el número de días de baja generados por los trabajadores superó levemente los 4,9 millones, la cifra ascendió a más de 5,5 millones en 2014 y se situó por encima de los 6,8 millones en 2015. El incremento supera en un 23,43% los datos del ejercicio anterior.

"Cuando empeora la situación, económica la gente coge miedo", señala Franchy, razón por la que a partir del primer trimestre de 2014 no sólo ha aumentado el volumen de bajas, sino también la duración media de las mismas. De los 37,5 días de 2014 se pasó a los 42,7 del pasado ejercicio; en ambos casos por encima de la media nacional, que se situó en 37,5 y en 37,8.

Los problemas que se derivan del Servicio Canario de la Salud (SCS) son, a juicio de Franchy, otro de los factores que contribuyen a que el absentismo laboral se incremente. La concesión de "bajas sociales" -aquellas que pide el trabajador para, por ejemplo, conciliar la vida laboral con la personal-, las listas de espera, la desconexión entre la atención primaria y la hospitalaria y la deficiencia de las inspecciones médicas en las revisiones de las altas y bajas "retrasan los procesos".

Uno de los primeros agentes en sufrir las consecuencias de esta situación son las empresas. Éstas tuvieron que hacer frente el pasado año a un coste medio de 170,7 euros por día de baja. El secretario general de la Confederación Canaria de Empresarios, José Cristóbal García, lamenta que "la carga sea tremenda", algo que repercute en la competitividad de las compañías.

Mientras, el coordinador de Salud Laboral de Comisiones Obreras en Canarias, Víctor Toledo, defiende que, además de atajar las deficiencias del SCS, se tiene que mejorar la calidad de los empleos, porque a pesar de la incipiente recuperación, han aumentado la precariedad y las sobrecargas, "por lo que se generan más patologías".