Casi cuatro de cada diez nuevos contratos laborales suscritos en julio (el 37,5 % del total) tenía una duración igual o inferior a un mes, de acuerdo con los últimos datos de contratación publicados por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).

Durante el mes de julio se firmaron más de 1,7 millones de nuevos contratos, de los que solo cerca de 88.400 tenían una duración indefinida, lo que significa que el 95 % era temporal.

La elevada temporalidad es una de las características del mercado laboral español -muy influido por el componente estacional-, en el que los nuevos puestos de trabajo son fundamentalmente empleo asalariado a tiempo completo creado por empresas privadas del sector servicios, con duración determinada y repartido prácticamente a partes iguales entre hombres y mujeres.

Esta es la foto que muestra la Encuesta de Población Activa (EPA) del Instituto Nacional de Estadística (INE), según la cual seis de cada diez nuevos ocupados que encontraron trabajo en el segundo trimestre del año eran asalariados con contrato eventual.

Del total de trabajadores ocupados en España (más de 18,3 millones) solo dos de cada diez son temporales (3,9 millones), aunque cabe destacar que de ellos hay 43.500 con contratos de un día, que suponen el 1,1 % del total de eventuales, pero que se han duplicado respecto a 2008.

Según los datos del SEPE de julio, casi la mitad de los nuevos contratos temporales (el 47,2 %) obedecen a circunstancias de la producción, mientras que el 37,8 % son por obra y servicio, y el 8,2 % por interinidad, en tanto que el resto se reparte en otro tipo de contratos, entre ellos, el de relevo, el de prácticas o el de formación.

La mayoría de los contratos eventuales por circunstancias de la producción (60,4 %) tienen una duración de un mes o menos y solo un 1,1 % supera los seis meses.

En el caso de los contratos por obra y servicio, la mayoría (79,1 %) no determina la vigencia, aunque destaca el 11 % que dura una semana o menos, una proporción similar a la que se da entre los contratos de interinidad, la mayoría de los cuales no fija fecha de finalización, si bien algo más del 15 % son de entre uno y siete días.

La cifra de contratación no coincide ni con la de afiliados mensuales a la Seguridad Social ni con la de ocupados trimestrales de la EPA, puesto que cada trabajador ha podido tener varios contratos en ese periodo de tiempo.

Tampoco coinciden los más de 450.000 afiliados que ha ganado entre abril y junio la Seguridad Social, que ofrece los datos mes a mes, con los 271.400 nuevos ocupados contabilizados por la EPA del segundo trimestre, lo que al margen de metodologías diferentes refleja en alguna medida el avance de la temporalidad.

Sin embargo, si se toma la media móvil de los últimos doce meses, ambas estadísticas reflejan una tasa anual de crecimiento del empleo parecida, del 2,43 % en el caso de los datos de Estadística y del 2,89 % en los de la Seguridad Social.