La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Turismo El desafío de la internacionalización

Riu internacionaliza a más de una veintena de sus proveedores

La cadena hotelera empleó, durante el ejercicio pasado, tres millones de euros en compras a empresas canarias para abastecer a sus establecimientos en Cabo Verde

Riu internacionaliza a más de una veintena de sus proveedores

Más de una veintena de empresas canarias han traspasado las fronteras regionales de la mano de Riu. Desde el aterrizaje de la cadena hotelera en las Islas en 1985, siempre ha apostado por establecer relaciones comerciales con empresas del Archipiélago tanto en el mercado local como en el extranjero. En 2015, el volumen de compras a firmas isleñas alcanzó los 39 millones de euros, de los que tres millones corresponden a pagos por el abastecimiento a sus establecimientos en Cabo Verde y el resto a los realizados por suministros en Canarias.

El turismo, motor de la economía isleña, representa un tercio del Producto Interior Bruto (PIB) del Archipiélago. El buen estado de salud del sector se refleja en la creciente cifra de turistas que registra la comunidad desde 2011. En los nueve primeros meses de este año, 9,6 millones de visitantes foráneos han aterrizado en los ocho aeródromos canarios -1,2 millones más que el ejercicio pasado-, acercando el objetivo de batir la barrera de los 14 millones de viajeros en un año. Además, el volumen de afiliaciones a la Seguridad Social en la actividad turística ha crecido un 14,5% en los últimos cuatro años. Estos números conducen a Benito Álvarez, quien fundó hace cuarenta años la empresa hortofrutícola Benito Álvarez López, a afirmar que "el turismo nutre a la economía". La compañía, que comenzó vendiendo los tomates, plátanos y tunos que producía en San Bartolomé de Tirajana, cuenta en la actualidad con 18 empleados en las Islas y una plantilla de veinte personas en Cabo Verde, a donde llegó con el establecimiento de la cadena hotelera, fundada por la familia Riu en 1953, en el archipiélago africano.

Riu cuenta en ese país con cuatro hoteles que suman 2.703 camas. Los establecimientos alojativos se reparten entre las islas de Sal -donde se encuentran Riu Palace Cabo Verde y Club Hotel Riu Funana- y Boavista -donde están ubicados Club Hotel Riu Karamboa y Hotel Riu Touareg-. Llegar hasta allí para las empresas canarias supone todo un trampolín. "Pero no solo es una oportunidad, sino que también es un desafío", matiza la responsable del área de Almacén y Gestión de Benito Álvarez López e hija del fundador, Magdalena Álvarez. A finales de 2006 la compañía hortofrutícola, que compra las frutas y verduras en Mercalaspalmas -y la inmensa mayoría de origen canario-, se instaló en Cabo Verde para abastecer a los establecimientos de la cadena hotelera, tal y como hace en Canarias. Tanto en Sal como en Boavista cuenta con una planta logística y en la segunda isla, además, la empresa canaria planta algunas frutas y verduras como pimientos, pepinos, tomates y papayos.

Los principales hándicaps con los que se ha encontrado esta empresa en Cabo Verde son, según expone Magdalena Álvarez, la burocracia, la rigidez de las normas, la presión fiscal o el transporte marítimo. Asegura que adaptarse a un mercado completamente nuevo es complicado, por lo que equipara la internacionalización con una "carrera de fondo".

Su padre, que habló personalmente con "Luis Riu padre" para ofrecerle sus servicios, tiene claro que el sector turístico juega un papel transcendental para el resto de actividades. "Desde que el sur se apaga, ya la vela no se enciende en toda la Isla", remarca.

Al igual que esta empresa, otras han logrado crecer y expandirse en el mercado caboverdiano. Emicela, productora y distribuidora de la alimentación y los amenities; Pamare, compañía de embutidos y productos lácteos; Infoagua Control y Prevención, planta desalinizadora y potabilizadora; Tecnoproclime Profesional, dedicada a la limpieza industrial en los hoteles; y Droguería Venezuela, distribuidora de bienes para la higiene profesional y segundo proveedor más antiguo de la cadena hotelera en Canarias. No en vano, la relación con esta empresa se remonta, incluso, a antes de la apertura en 1985 del primer hotel de la compañía en las Islas, el Riu Palmeras en Playa del Inglés.

Pero estas seis compañías canarias no son las únicas en las que Riu ha apostado para su llegada y expansión en Cabo Verde desde 2005. Además de los productos que ofrece en sus hoteles, la cadena confía a otras 16 empresas canarias del sector de la construcción, cristalería, albañilería o aluminio las obras y reformas que sean necesarias.

Canarinver soluciones, Montajes Industriales Mario Diego Mateos, Depuraciones y Bombeo Alemparte, Conyesa o Gasten Solar son ejemplo de ello. De hecho, desde la compañía se subraya que Riu se integra en los lugares en los que opera, por lo que trabaja para contribuir a dotar de un mayor bienestar a su entorno social "generando oportunidades de desarrollo económico y social.

Productos locales

La apuesta de Riu por los productos locales también se refleja en las cifras. La cadena cuenta con 40 proveedores isleños y a lo largo del ejercicio pasado destinó 10,3 millones de euros a la adquisición de alimentos 100% canarios. Entre la mercancía comprada destacan 2,9 millones de litros de agua mineral, 4,5 millones de huevos frescos o 60.000 kilos de quesos. La compañía hotelera explica que no solo confía en el producto local porque es un modo de favorecer la economía del Archipiélago, sino también por su calidad, la posibilidad de agilizar la gestión, reducir los tiempos y garantizar la frescura de los productos.

El proveedor más antiguo de la cadena en las Islas es la panificadora La Estrella. Santiago Ortega, copropietario de la empresa, expone que aproximadamente el 70% de la producción se destina al turismo. La compañía nació en Agüimes en 1954, luego se estableció en Vecindario y, finalmente, se instaló en Maspalomas "por las necesidades que surgieron para atender a los hoteles".

La panificadora también comenzó a trabajar para Riu antes de que su primer hotel abriese las puertas en la Isla. "Luis Rui padre contactó conmigo por las referencias de otros hoteleros y me hizo una oferta que me pareció descabellada", comenta.

Durante la construcción del Hotel Riu Palmeras, su empresa tendría que llevar todos los días treinta panes para los obreros. Pero una vez que el establecimiento quedase inaugurado, sería otro proveedor el que surtiese de este alimento a la cadena hasta que tres o cuatro años después volviese a llamarlo. "Y cumplió su palabra", enfatiza Ojeda, quien nunca supo la razón de esta propuesta que ha contribuido, "sin duda", a hacer crecer su negocio.

Riu cuenta en el Archipiélago con 17 hoteles, de los que ocho están en Gran Canaria, cuatro en Tenerife, otros cuatro en Fuerteventura y uno en Lanzarote. La panificadora abastece a todos los establecimientos de Gran Canaria y al de la isla conejera, donde la empresa también cuenta con una fábrica. A los de Fuerteventura y Tenerife solo envía especialidades, como panes centroeuropeos y nórdicos.

Si el sector turístico comenzase a decaer, advierte que la demanda residencial también lo haría, porque muchos ciudadanos emigrarían en busca de trabajo a otros puntos del país o el exterior. Por eso, el empresario anima a "mimar" a todos los visitantes que están llegando al Archipiélago como consecuencia de los problemas de seguridad que afectan a destinos competidores -como Turquía, Egipto o Túnez- para lograr fidelizarlos.

"Desayuno como barómetro"

El aumento del número de turistas que recalan en las Islas como consecuencia, en buena medida, de ese desvío de turistas se nota a primera hora de la mañana. ""Los desayunos son el barómetro de la ocupación", apunta Ortega, quien explica que el incremento del consumo de panes se percibe durante la primera comida del día porque todos lo turistas, independientemente de si alojan en régimen de media pensión o todo incluido, siempre desayunan en los hoteles.

Para Magdalena Álvarez, en cambio, la buena marcha del turismo se refleja en la pérdida de la estacionalidad. "Nosotros hemos notado que antes los picos estacionales eran mucho más pronunciados en la demanda y ahora estamos en una temporada constante", determina.

Compartir el artículo

stats